Números, cuentas, medidas de seguridad, servicio de orden, organización final, balance de reuniones anteriores y últimos preparativos para la que debe ser la gran manifestación del Día de Andalucía.
- Tenemos que superar las cifras de participación anteriores. Si siempre hemos enviado un mensaje serio, al Gobierno andaluz, instándole a cumplir el compromiso adquirido cuando se ejerce un cargo público, en esta ocasión más, por el reto que nos han planteado los resultados del 2 de diciembre pasado.
Quien se expresa así es Salvador García Urbano, presidente de la Asamblea Nacional Andaluza. Pero, –añadimos– ¿quién ha sido culpable, la abstención, los andaluces?… ¿Pueden ser responsables los votantes?
- Toda la responsabilidad es del partido que ha gobernado. Si no hubiera desmotivado a los andaluces, si no hubiera gobernado para sus intereses, si hubiera pensado en Andalucía en vez de en su partido, este resultado no habría llegado.
- La abstención ha sido en gran medida responsable de la subida de la ultraderecha –añade Antonio Muro, coordinador general del Partido Nacionalista Andaluz, Secretario de organización de Andalucía en Marcha– pero si no se hubiera dado ese mal gobierno que apunta Salvador, esa abstención habría sido muchísimo menor.
Los representantes de los diversos colectivos, a su vez agrupados en varias plataformas, por operatividad, comulgan por lo general con la misma forma de valorar los acontecimientos. Y afirman que si bien este no va a ser el primer año que esta manifestación se celebre, sí debe tener una asistencia mucho mayor que los anteriores, porque lo exige la circunstancia que vive Andalucía.
Los temores parecen fundados: está en peligro la industrialización, los salarios, las pensiones, la vivienda, la conservación de la vida que supone el Parque Nacional de Doñana. Los partidos que han tomado el poder se han mostrado con reiteración contrarios a todas estas mejoras. El partido Popular, que recibe órdenes desde Madrid, fue el que dio orden de desecar la marisma y puso en marcha la construcción de un gigantesco almacén de gas en ese enclave único en el mundo.
Los andaluces tienen hoy motivo para sentir miedo, para precaverse, para buscar la forma de defenderse de las amenazas. Por todo ello, a ocho días de la manifestación del Día de Andalucía, preparan concienzudamente los últimos detalles, en esta reunión de sus representantes –democráticamente elegidos por las entidades organizadoras– celebrada, como la anterior, en la ciudad de Antequera. Una garantía de la unidad de Andalucía.