A lo largo de este año está previsto que lleguen los primeros aviones no tripulados, Predator B, al Ejercito del Aire. Concretamente durante el segundo semestre deberían comenzar a operar desde la Base Aérea de Talavera la real en Badajoz encuadrados en el Ala 23.
El Predator B o NR05 como lo denomina el Ejército del Aire, necesita para sus operaciones y mantenimiento una serie de medios de apoyo que están en procesos de adquisición y entrega en la citada base de Talavera la Real y que debería desplegarse allá donde se envíe el Predator.
Estos equipos, no demasiado especializados, tienen un coste de adquisición que no supera los 50.000 euros, según la licitación que puso en marcha la Dirección de Adquisiciones del Mando d Apoyo logístico del Ejército del Aire.
En dicha licitación, el precio constituía el 70 % de la valoración de las ofertas, determinándose que la entrega de los equipos debía realizarse entre el 11 de febrero y el 30 de noviembre de este año. Pero ha comenzado con mal pié y ha surgido un problema.
La licitación se declaró desierta el pasado 19 de febrero, después que las empresas que concurrieron no hayan cumplido con el nivel esperado, ni con las especificaciones técnicas, de algunos de los elementos.
Los requisitos eran, un generador eléctrico portátil, que en ninguno de los dos casos cumplía el requisito de voltaje, mientras que una torre de iluminación portátil no cumplía el requisito de voltaje de salida en ninguna de las dos propuestas. Además de la grúa torre portátil que tampoco cumplía con esas necesidades tecnicas.
Por lo tanto, el Ejército del Aire espera que antes de que la llegada de este avión no tripulado llegue al España, se tengan las herramientas necesarias para su mantenimiento y movilidad.