El PSOE ha deslizado que quiere gobernar en solitario. Normal. El PSOE es el Régimen y quiere poder moverse sin ataduras y con las mínimas concesiones posibles. Y en parte tiene razón, pues los españoles han votado mayoritariamente por el Régimen (sumen los votos de PP, PSOE, Cs y Vox), pero tanto la Izquierda como los catalanes, vascos y valencianos deben negarse. Gobierno de coalición o nada.
Puede parecer una posición extrema, pero no lo es. El PSOE es el partido de la traición, el partido del engaño, la estafa inventada por el Régimen para hacer creer a muchos españoles que viven en una democracia y para legitimar este engendro internacionalmente. Un Estado, el español, que de tantas carencias que tiene se parece más a la dictadura de la que procede que a la democracia avanzada a la que dice querer mutar.
Por tanto, que el gobierno de los próximos cuatro años sea progresista dependerá de la fortaleza de la Izquierda y los nacionalistas para resistir a la amenaza de la derecha. Porque la troika franquista es la pistola que los socialistas –y el Régimen– colocarán en la sien de los demócratas para conseguir su rendición. Otra vez.
Pero, afortunadamente, los demócratas hemos conseguido un aliado inesperado gracias a la ambición: Ciudadanos. Un Cs fuerte que aspira a liderar la derecha ya no es una posibilidad de gobierno, aunque el PSOE pactaría con ellos encantado, salvo que los amos tiren de la correa. Pues no convendría olvidar que la combinación PSOE-Cs es la más deseada –con el resultado obtenido– por las élites, el IBEX 35 y el Capital, que para el caso es lo mismo, para perpetrar un gobierno ‘moderado’. Esto es, lo mismo que el PP (reforma laboral, ley mordaza, recortes, etc.) pero con ‘viernes sociales’, ministros famosetes y viajes en Falcon.
Luis Gonzalo Segura es exteniente expulsado por denunciar corrupción en el Ejército de Tierra y autor de ‘Un paso al frente’ (2014), ‘Código rojo’ (2015) y ‘El libro negro del Ejército español’ (2017).