Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ha confirmado que registrará en el Congreso su propio grupo parlamentario, sin integrar a EH Bildu, y que inscribirá como portavoz titular a Gabriel Rufián, que concurrió como número dos por Barcelona, y como portavoz adjunta a Carolina Telechea, que ocupó la tercera plaza de esa candidatura.
A priori, el partido no ha reservado ninguna tarea a su líder, Oriol Junqueras, que ha sido suspendido en sus funciones por estar en prisión preventiva por el ‘procés’, una decisión que ERC ha recurrido ante la Mesa del Congreso.
Además Junqueras acaba de ser elegido eurodiputado en las elecciones de este domingo y su intención es renunciar al acta en el Congreso para tomar posesión como miembro del Parlamento Europeo. Para ello, necesitará permiso del Supremo para poder acreditarse ante la Junta Electoral Central.
Según han precisado a Europa Press fuentes parlamentarias, Rufián, portavoz adjunto en la anterior legislatura, asciende ahora al puesto que venía ocupando Joan Tardà, quien decidió no concurrir a las generales poniendo fin a su etapa en Madrid.
La portavocía adjunta recaerá en manos de Carolina Telechea, que desembarcó en el Congreso el pasado mes de junio sustituyendo a Ester Capella, cuando dejó la Cámara para ser nombrada consellera de Justicia, y que ahora ha revalidado su acta.
Dificultades para Bildu
Esquerra no tendrá problema para constituir su propio grupo porque el pasado 28 de abril logró 15 escaños en la Carrera de San Jerónimo, aunque ahora uno de ellos esté suspendido. Sin embargo su decisión dificultará que EH Bildu haga lo propio, porque en solitario la coalición abertzale no cumple los requisitos mínimos para tener grupo y lo previsible es que continúe en el Mixto.
La coalición abertzale, que ha concurrido a las europeas con ERC, selló con sus socios catalanes un acuerdo de colaboración en el Congreso antes de las generales e incluso llegaron a hablar de compartir grupo, una opción que ahora se confirma desechada.
Aunque las dos formaciones estuvieron explorando fórmulas que favorecieran a ambos, finalmente ERC ha optado por registrar su propio grupo sin prestar diputados a los vascos para que llegaran al mínimo de cinco diputados que exige el Reglamento.
Aún así, Bildu seguiría teniendo el obstáculo del porcentaje, ya que no superó el 15% en todas las circunscripciones. Logró el 16,70% de los votos en todo el País Vasco, pero sólo superó el 15% en Guipúzcoa (23,42%) quedándose rozando el 14% en Álava y con el 13,38% en Vizcaya, mientras que en Navarra obtuvo un 12,77% y ningún escaño.
Así las cosas, todo indica que los abertzales, que han doblado su representación respecto a la anterior legislatura repetirán en el Mixto, previsiblemente con Junts per Catalunya (siete), Coalición Canaria (dos diputados), Navarra Suma (otros dos), el único representante de Compromís y el del Partido Regionalista de Cantabria, que por primera vez tiene representación en la Carrera de San Jerónimo.
Ventajas políticas y económicas
Tener grupo propio supone grandes ventajas políticas, económicas y de medios. Quien lo constituye tiene garantizada su representación en todas las comisiones parlamentarias, en la Diputación Permanente y voz propia en la Junta de Portavoces y capacidad para intervenir en todos los debates en igualdad de condiciones; mientras que dentro del Grupo Mixto hay que repartirse tiempos de intervención y asientos en las comisiones.
En las sesiones de control, tener grupo propio posibilita entrar en los cupos de preguntas e interpelaciones al Gobierno, así como ventajas a la hora de incluir sus proposiciones no de ley en los plenos, pero en el Grupo Mixto todo ese ‘pedazo de tarta’ debe distribuirse a partes iguales.
En el plano económico, por ejemplo, durante la anterior legislatura las fuerzas políticas que se constituyeron en grupo recibieron en el Congreso una subvención fija de 28.597,08 euros mensuales y otra variable, en función del número de diputados que componían el grupo, que ascendía a unos 1.645,49 euros mensuales por escaño. El sistema en el Senado es idéntico, aunque varían las cantidades.
Además, sólo habiendo conseguido grupo parlamentario propio se puede acceder al cobro de las subvenciones por envío gratuito de propaganda electoral durante la campaña. Y las ventajas se prolongan para las siguientes elecciones, porque los que ahora lo consigan tendrán opción a presencia en los futuros debates electorales y planes de cobertura informativa de los medios públicos.