El vicepresident de la Generalitat y conseller de Economía, Pere Aragonès, ha pedido este jueves al Gobierno que les retire el control financiero porque, pese a cumplir con los objetivos de déficit, mantienen la supervisión «por discriminación ideológica de los miembros que forman parte del Govern».
«Se nos ha dicho que si no hubiera un Govern independentista no habría este control. Aunque somos los que cumplimos y cumplimos sus objetivos injustos, y ellos son unos incumplidores sistemáticos», ha sostenido en una interpelación en el pleno del Parlament.
Aragonès ha atribuido la decisión de mantener el control financiero a una «decisión política e ideológica», lo que considera un abuso del poder político con objetivos ideológicos.
«Los Gobiernos del Estado no soportan que los independentistas ganemos elecciones, y nos utilizan y obligan a que demos esta información», ha lamentado el vicepresident de la Generalitat.
A su juicio, la supervisión del control financiero de la Generalitat vulnera la autonomía de Cataluña, y ha instado al Estado a pasar cuentas por sus incumplimientos en esta materia.