El Parlamento Europeo no ha permitido este martes al ex president Carles Puigdemont y el exconseller Toni Comín entrar en la cámara y empezar algunos de los trámites para ser eurodiputados, según han denunciado en una atención a los medios desde Bruselas.
Así, aunque ambos obtuvieron un escaño en las elecciones del 26-M y son eurodiputados electos, no han podido hacerse la fotografía oficial ni entrar en las instalaciones, donde sí entran otros políticos que también lograron representación en los comicios. Según asegura Puigdemont, la orden de vetarles la entrada la ha dado el secretario general del Parlamento Europeo.
Fuentes del Parlamento Europeo han confirmado que los nuevos diputados pueden obtener «una acreditación provisional para facilitar su acceso al Parlamento mientras no llegan las comunicaciones oficiales de los Estados miembros» con la lista definitiva de eurodiputados.
Aún así, desde la cámara aseguran que se reservan el derecho a «no conceder ninguna facilidad hasta asegurarse de que la persona ha obtenido el acta de diputado».
Respuesta inmediata
Puigdemont ha anunciado que ya han iniciado todos los trámites para poder «denunciar esta grave violación de los derechos fundamentales de los ciudadanos europeos». «Espero que el Parlamento Europeo no siga la senda marcada por las autoridades españolas y no se extienda en el corazón de las instituciones europeas esta costumbre de violar derechos fundamentales», alertado.
Puigdemont aseguró que «hoy mismo» Welle «recibirá un burofax» suyo y el presidente de la cámara, Antonio Tajani, también» recibirá un requerimiento «. «Exigiremos todas las responsabilidades legales ante esta gravísima discriminación», ha denunciado.
Así, el líder de JxCat ha reclamado que todos «deben tener los mismos requisitos para acceder a la condición de eurodiputados». «Es un juego sucio, han intentado hacer una jugada como la junta electoral central», dijo, convencido de que esta «también la perderán».
