Como decíamos en la última entrega, creemos que es justo dar luz a todos los hechos que tanto los coroneles Pérez Aragón y Muñoz Mompó, como su mandos jerárquicos el General Otero y el General Salto amén de su antecesor García Arnáiz, han ocultado convenientemente durante todo este tiempo.
No podemos olvidar que hablamos de una unidad con menos de 44 efectivos en plantilla y que en menos de cinco años ha acumulado más de treinta denuncias por irregularidades, y en la que se han producido más de diez bajas psicológicas, siete de las cuales han acabado en la expulsión del ejército, la última el uno de julio de este año, algo que ha sido llevado al senado.
Además hay que añadir que recientemente el JDO. CENTRAL CONT/ADMVO en una sentencia, ha reconocido la existencia del acoso laboral que sufría el comandante por parte del coronel Pérez Aragón y algunos de los suboficiales.
(Para no extendernos en exceso solo se presentan algunos de los documentos probatorios existentes sobre los hechos que se relacionan).
Relación de acciones punibles ocultadas por ambos jefes de unidad y sus mandos
Tte. Vanesa Carballido Gómez:
• Contratación irregular violentando la norma de contratos del sector público; aprovechó la ausencia del jefe de unidad y del habilitado para cambiar el proveedor del pan a dedo violentando la ley de contratos del sector público (IMAGEN A).
• Intento de Malversación de fondos; negoció a espaldas del jefe de unidad directamente con un proveedor el cambio de electrodomésticos ya acordados por el órgano de contratación previa aceptación del jefe de unidad, por otros de su preferencia personal.
• Incumplimiento de una orden directa del Jefe de Estado Mayor; anuló la obligada formación semanal de bandera ordenada por el Jefe de Estado Mayor del Aire por el banal interés personal de no tener que madrugar media hora más un día a la semana (IMAGEN B).
• Modificar un documento oficial en contra de una norma superior para simular validez normativo a su invasión de las competencias del habilitado; aprovechando que era la segunda al mando y tenía encargado la revisión del procedimiento que regulaba la organización de la unidad incluyó como cometidos de su puesto responsabilidades que eran del habilitado en contra de una normativa de rango superior.
• Cometer actos que atentaban contra la dignidad personal o en el trabajo de sus subordinados; no sólo existía un parte por escrito denunciando dicho trato, además hubo varios testigos durante el expediente sancionador del comandante que también lo manifestaron.
• Dejadez Grave de funciones; a pesar de la obligación normativa que tenía, nunca impartió la instrucción policial del personal de la Policía Aérea llegando a permitir que estuvieran más de dos años sin hacer instrucción de tiro, ni les proporcionó el adecuado material policial, nunca impartió la instrucción al personal de tropa, nunca impartió la instrucción básica de combate al personal de la unidad, no realizaba las juntas mensuales de seguridad de vuelo a las que venía obligada por normativa. También acalló un parte por escrito para eludir el arresto de una cabo que era su amiga personal
• Falsedad en documento público; para ocultar su dejadez de funciones en relación a la instrucción policial firmo los certificados individuales del personal de la policía de haberla recibido.
• Abuso de mando; se prevalía de su superior empleo para dar órdenes en contra de la normativa existente al servicio de sus intereses, como ordenar al habilitado que le presentara a los proveedores indicando que desde ese momento ella sería la que se relacionara con ellos o imponer menús en la cocina según sus criterios personales, ordenar al jefe de transmisiones colocar una red de internet en contra de la normativa de seguridad que regulaba estos asuntos, etc.
• Posible delito contra el Plan Nacional de Seguridad; se aprovechó de su empleo y cargo en la unidad para poder eludir junto a su familia el control de equipajes del aeropuerto internacional de Santiago violentando el Plan Nacional de Seguridad. (IMAGEN C)
• Deslealtad; presentaba ante suboficiales y tropa de la unidad su falta de profesionalidad y dejadez como responsabilidad del comandante pretendiendo que este no le dejaba trabajar.
Subof. Mayor Ramón Íñiquez López
• Dejadez grave de funciones; ocultaba al mando cuántos abusos realizaba su amiga personal la teniente Carballido parando las quejas de cuantos suboficiales y tropa acudían a él, en lugar de informar al jefe de unidad de la situación real de este personal en la unidad. (IMAGEN D)
• Deslealtad; presentaba ante suboficiales y tropa de la unidad la falta de profesionalidad y la dejadez de la teniente como responsabilidad del comandante pretendiendo que este no le dejaba trabajar, llegando incluso a calificar al comandante en público como “cáncer para la unidad”. (IMAGEN D)
Brigada Manuel Varela Cardiero
• Dejadez Grave de funciones; a pesar de la obligación normativa que tenía, nunca impartió la instrucción policial del personal de la Policía Aérea ocultando al mando que llevaban más de dos años sin realizar instrucción de tiro, ni les proporcionó el adecuado material policial, nunca impartió la instrucción al personal de tropa, nunca impartió la instrucción básica de combate al personal de la unidad.
• Deslealtad; presentaba ante suboficiales y tropa de la unidad la falta de profesionalidad y la dejadez de la teniente y la suya propia como responsabilidad del comandante pretendiendo que este no les dejaba trabajar.
• Abuso de mando; actuando en connivencia con el jefe de Unidad el coronel Pérez Aragón sancionó a un soldado que había presentado quejas en relación a su gestión en la escuadrilla de policía, dos veces por los mismos hechos. La primera directamente y la segunda mediante parte por falta grave cuya tramitación al MAGEN paralizó el coronel Pérez Aragón sancionando él mismo, quien se hizo partícipe en lo que no dejó de ser un acto de intimidación y advertencia para el resto de personal de la policía. En ambas ocasiones y en contra de la ley se le impuso la sanción de arresto, privación de libertad, sin ningún tipo de motivación. Algo que se puso en conocimiento del tribunal Militar Central a través de una denuncia considerando este que no era sancionable ni siquiera disciplinariamente por carecer el acto de “intencionalidad espuria”.(IMAGEN E)
Brigada Miguel Pérez Castro
• Prevaricación / Daños al patrimonio de la defensa; prevaliéndose de su condición de delegado PRL justificaba directamente ante el jefe de unidad la necesidad de renovación de maquinaria asignando la adquisición directamente a la empresa de su conveniencia sin pasar por el habilitado. Llega al extremo de recoger de un proveedor una máquina de soldadura sin orden de compra, máquina que un año después seguía sin ser abonada.
• Incumplimientos PRL; a pesar de ser el delegado de PRL realizaba de forma habitual almuerzos en el taller de infraestructuras, del que era jefe su hermano, en contra de las directrices de prevención de riesgos laborales y permitió el acceso al tejado de una nave a nueve metros de altura de un operario sin ningún medio de protección (IMAGEN F). Ambos hechos fueron justificados por el coronel Pérez Aragón, el primero indicando que había hecho una investigación “personal” y comprobado que no existía peligro, y el segundo justificando que el operario se había subido el tiempo mínimo imprescindible para hacer la valoración del trabajo, justificaciones que luego fueron aceptadas sorprendentemente por el tribunal militar central. También utilizaba su condición de delegado de PRL de forma totalmente partidista al mirar para otro lado con los incumplimientos que realizaba su hermano pero exigir escrupulosamente el cumplimiento a compañeros no tan afines.
Brigada Adolfo Pérez Castro
• Prevaricación / Daños al patrimonio de la Defensa; intentaba externalizar todos los trabajos, ejemplo de ello la reparación de una barrera automática de la que fallaba un simple interruptor de final de carrera que meses antes había cambiado en otra gemela a la anterior. Alegó no estar capacitado para hacer el trabajo debiendo externalizarlo lo que multiplicó el coste por 10. Además mantuvo a la empresa Sumire Reformas SL como concesionaria única de las obras de la unidad presentando en exclusiva los presupuestos proporcionados por esta y camuflando contratos de obra menor como contratos de suministro menores para no verse obligado a presentar más presupuestos (IMÁGENES G-1 a G-3)
• Incumplimientos PRL; realizaba de forma habitual almuerzos en el taller de infraestructuras en contra de las directrices de prevención de riesgos laborales y permitió el acceso al tejado de una nave a nueve metros de altura de un operario sin ningún medio de protección. También dio lugar a un accidente laboral al colarse el comandante por una arqueta perimetral por su mal estado a pesar de haber recibido la orden un año antes de realizar su mantenimiento.
• Incumplimiento de sus deberes como militar; llega al despropósito de presentarse más de una hora tarde a un servicio de armas, algo nuevamente acallado por el coronel Pérez Aragón a pesar de haber recibido parte del hecho. (IMAGEN H)