El Partido Popular y Vox de Majadahonda han paralizado una iniciativa para destinar ayudas para la instalación de ascensores o rampas que faciliten el acceso a sus viviendas a personas con problemas de movilidad. Algunos de ellos son discapacitados o personas mayores que no pueden directamente salir de sus casas, situadas en el casco antiguo de la localidad.
La mayoría de los inmuebles del centro carecen de ascensor por la antigüedad de esos edificios, y esa antigüedad suele ir unida a la avanzada edad de sus propietarios. Esta iniciativa fue propuesta por el grupo socialista con el objetivo de reducir estos problemas a través de la concesión de ayudas municipales. Ahora, desde el PSOE «hay vecinos con movilidad reducida que viven prácticamente en una cárcel porque no pueden salir a la calle porque en sus edificios no hay ascensor y tienen verdadera barreras arquitectónicas», señala el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Majadahonda, Manuel Fort.
Se trata de viviendas edificadas en la década de los 70 del siglo pasado, algo que incrementa mucho más esas necesidades de acceso. Sin embargo, tanto los concejales del PP, que gobierna Majadahonda, como sus aliados de Vox ha unido sus votos para cerrar el paso a esta iniciativa. Por ahora los ancianos del centro de la localidad se quedan sin ayudas y muchos se quedan en casa porque no pueden ni salir.
Del mismo modo Font asegura que el nuevo gobierno está ignorando este tipo de problemas y se preocupa por otros que ellos consideran menos importantes, «parece mentira que el mismo gobierno municipal que va presumiendo de gastarse 300.000 euros en la remodelación de dos parques públicos no se preocupen de eliminar este tipo de inconvenientes a las personas con problemas de movilidad».
La propuesta socialista únicamente solicitaba que cada comunidad de vecinos recibiera un 25% de la inversión total, por ejemplo, para colocar un ascensor.
