El colectivo “Primer d’Octubre”, un sector crítico dentro de ERC, anunció el lunes 19 de agosto en la Universidad Catalana de Verano que presentarían una propuesta alternativa a la oficialista —Oriol Junqueras, Marta Rovira, Gabriel Rufián y Joan Tardà—. Ambas propuestas deberán ser votadas el próximo 15 de septiembre y serán presentadas en el próximo congreso, que se celebra el 30 de noviembre.
El sector crítico, cuyos participantes en el acto fueron Xavier Martínez, Jordi Taurinyà y Joan Puig, pretende que la formación implemente el mandato ciudadano del 1-O y, por tanto, exija a Pedro Sánchez concesiones para la investidura. Por ello, Joan Puig advirtió que ”defendemos el no a Sánchez y queremos que Sánchez trabaje”. Además, aseveró que no en el colectivo no comprenden el rumbo político de la formación, el cual se basa, según él, en ”dar estabilidad a España e inestabilidad en Cataluña”.
Igualmente, se quejaron de las maniobras políticas del sector oficialista por la filtración de documentos «días después haberse preparado una candidatura con unas líneas básicas hechas públicas”, lo que entienden que se trata de una “imprudencia» desleal («malas artes») que puede “influenciar en la ponencia política”.
El colectivo “Primer d’Octubre” se muestra, además, contrario a una convocatoria electoral, pues entienden que el objetivo de Esquerra Republicana no pasa por la lógica de Madrid. ”Nosotros no somos partidarios de ir a elecciones, lo primero que tenemos que hacer es una consulta a la militancia sobre la investidura Pedro Sánchez».
Muy al contrario, el objetivo de Esquerra debería ser, según este colectivo crítico, “implementar el mandato del Primer de octubre y que se cumpla lo que dice la ponencia política aprobada hace un año, en julio de 2018″.
El colectivo crítico presentará «un documento donde constará la profundización de los elementos principales como el cumplimiento del mandato del Primero de Octubre y defender el asamblearismo del partido para que las decisiones no se toman con bastante debate interno”. Aunque ya asumen que no será sencillo, pues nunca se han realizado consultas internas en la militancia porque no se ha regulado el procedimiento ni se ha permitido el acceso a las bases de datos para poder conseguir el apoyo necesario (10% de la militancia).
A pesar de las dificultades, el colectivo “Primer d’Octubre” seguirá adelante para intentar ”frenar el desencanto de la militancia de ERC” y conseguir que “antes de que desgarran el carné [los afiliados], que vean nuestra luz al final del túnel”.
