La sancionaron por incumplir “las normas de actuación del militar como servidor público” pese a que sus tatuajes no coinciden con los de la actriz y a que la mayoría de los testigos no la reconoce como quien sale en las imágenes.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Daroca (Zaragoza) ha imputado a un general, dos tenientes coronel y una capitana del Ejército de Tierra por su implicación en la falsa atribución de tres vídeos pornográficos a una soldado.
Los cuatro investigados han sido citados a declarar como investigados ante la gravedad de los hechos constitutivos de un delito. La denuncia presentada por la soldado habla de la eventual existencia de uno de injurias graves, por “la intención de causar un ataque a la dignidad ajena, el propósito de ofender la dignidad personal, de menoscabar la fama de la persona, o atentar contra su propia estima”, y de otro de falsedad por la presunta manipulación de varias imágenes.
Los investigados son el general Ángel Serrano, autor de la resolución que convirtió en definitiva la sanción; el teniente coronel Carlos Granados, que es quien puso en marcha el expediente sancionador; la capitana Cristina Serrano y que actuó como testigo de cargo, y la teniente coronel María Gracia Cañadas, jefa de la unidad, adscrita al cuartel de El Goloso, y que firmó el informe que originó el expediente a la soldado, C. V. B.
Un calvario que incluyó un aborto