La desinformación que ofrecen las cadenas privadas evidencia claramente su línea editorial que sirve a los intereses del capital, sus propietarios son multinacionales, bancos y constructores, muchos de ellos envueltos en tramas de corrupción, además de la Conferencia Episcopal y el Opus Dei.
TVE y RNE no se salvan, dejan de ser espacios públicos para convertirse descaradamente en la extensión mediática del partido político que en ese momento ocupe la Moncloa, el dinero de nuestros impuestos utilizado de forma fraudulenta para satisfacer intereses particulares, en que el capital se beneficia después de la correspondiente lobotomización social.
Ejemplos hay muchos, vamos a retomar unos pocos….
Las falacias fabricadas por las Cloacas del Estado contra Iglesias y los Morados fueron y aún son vertidas hacia la audiencia por medio del brazo mediático del capital, pero esta agresión va más allá de lanzar calumnias contra un líder político e intentar pulverizar a la formación que representa, lo verdaderamente delicado, infame y ruín es que este «Modus Operandi Delincuencial» bajo las batutas de Populares y Socialistas nos afectan a todos los ciudadanos, porque viola nuestra democracia al utilizar las instituciones en contra nuestra, no importa nuestra ideología ni bandera.
En el imaginario colectivo todas las mentiras sobre los Morados se han convertido en una verdad indiscutible, estando comprobado su montaje, lo lógico hubiese sido que estos espacios informativos y de opinión hubiesen reconocido el error en sus afirmaciones previas, pero el tema no se expuso y si se llegó a hacer fue tan solo una nota intrascendente.
«Es más fácil engañar a la gente, que convencerlos de que han sido engañados.» – Mark Twain.
Las entrevistas de seudo periodistas conducidas por senderos escarpados incomodando a Iglesias, en que el «profesional de turno», incurre en falacias de forma intencionada tergiversando la información, ofreciendo un espectáculo barato para confundir e influenciar al espectador y/o, la única preocupación de estos espacios es ventilar los problemas domésticos de los Morados, magnificándolos de una manera ridícula, esta maniobra distractoria la utilizan para desviar los verdaderos e importantes problemas que nos aquejan como sociedad.
El problema catalán se explota de tal manera que en los programas de opinión, de forma irresponsable, se alienta al enfrentamiento entre dos bandos, fue así que la mayoría de la sociedad de diferentes puntos de la geografía, sin estar interesados en ese asunto, después de tanto bombardeo mediático se decantó por uno de los dos extremos, no podemos olvidar ese torpe e importuno cántico de «A por ellos». Las voces que de forma responsable exigen diálogo y consenso para la resolución del conflicto, no tuvieron ni tienen el eco que se merecen, tan solo son anecdóticas.
¿Acaso es normal que un partido de extrema derecha haya irrumpido en el escenario político de nuestro país?¿Quiénes son los responsables de resucitar ese oscuro pasado?. Los artífices de esta negra hazaña son los medios de comunicación aprovechando la supuesta ruptura de España por la situación Catalana, dando voz y cabida en sus espacios a estos sujetos, un grupo de nostálgicos obtusos y atrasados de la España anacrónica.
¿Por qué lo hicieron? Sirviendo al Sistema para reunificar el voto de la derecha perdido y maltrecho después de los casos graves de corrupción, detonantes para la salida del PP de la Moncloa. Esa es la estrategia del capital, crispar el ambiente, polarizando a la sociedad. Dividir al pueblo, así nos es difícil organizarnos como un solo bloque, porque much@s no tienen conciencia de clase y siguen votando a los verdugos de sus opresores.
Silenciar los casos de corrupción es perverso, que de los ERES en Andalucia se sepa tan poco o nada, la Caja B del Partido Popular, la Púnica, Leso, Gurtel, los papeles de Panamá, etc, etc, etc…..
Tantas tramas que acumulan Socialistas y Populares y pasan de puntillas sobre el asunto, que no son cuatro duros lo que nos han robado. Las cuentas en Suiza del comisionista y mata elefantes, tantas cositas dejadas en el tintero, dejar que pase el tiempo y la poca memoria de la gran mayoría, borrón y cuenta nueva, aquí no ha pasado nada.¿Acaso este es el proceder de medios de comunicación responsables?.
¿Que credibilidad nos pueden dar esas tribunas que desde sus púlpitos son cómplices en contra de la verdad y la honestidad?, Ninguna.
¿Dónde quedó el periodismo de verdad?, Debo reconocer que hay espacios políticos en que intervienen muy pocos periodistas y tertulianos de una talla excepcional que brillan por su honestidad y ecuanimidad en esos desiertos estériles y vacuos. Esta es la altura de los espacios de desinformación, un espectáculo atroz, en donde las mentiras, la manipulación y la impunidad campan a sus anchas.
¿Qué debemos hacer al respecto?, Apagar la tele y la radio, olvidarnos por completo de esos telediarios y espacios de opinión del Stablishment. Estos vectores de desinformación se convierten sin que la mayoría se de cuenta, en los inductores que por voluntad propia del individuo al carecer de sentido crítico, nos conducen hacia un precipicio de pobreza y miseria cortesía del capital.
Las nuevas tecnologías como Internet nos han facilitado el acceso a nuevos medios de consulta e información como periódicos digitales o Blogs que se financian de forma independiente o mediante crowfounding, es así que no hay presiones por parte del terceros, enfocando su labor al servicio de la sociedad de forma imparcial, ofreciendo información justa y veraz, son espacios políticos alternativos abiertos y plurales en que se defiende nuestra tan amada Democracia hoy vilipendiada por el capital.
«Déjenme controlar los medios de comunicación y voy a convertir cualquier nación en una piara de cerdos» – Josep Goebbels.