El movimiento «Tsunàmi Democrátic» (Tsunami Democrático), –inicitiva surgida de la sociedad civil-. ha asegurado este viernes que la desobediencia civil, por definición «no violenta», es una «herramienta» que habrá que utilizar de forma «intermitente pero sostenida en el tiempo».
En un mensaje difundido a través de las redes sociales, Tsunami Democrático ha alertado de que hay que ser consciente de que la respuesta a la sentencia del 1-O «puede durar meses o años» y que la desobediencia civil no busca crear un conflicto sino solucionar -el. «Este ciclo que ahora comienza debe servir para cambiar el marco y contribuir a hacer posible una solución política que permitirá resolver el conflicto: el ejercicio del derecho a la autodeterminación», destacaron. También han dicho que hay que sumar victorias para «acumular fuerzas».
A su vez, el Sindicato de Estudiantes ha convocado una huelga de 72 horas el 16, 17 y 18 de octubre por la sentencia del Tribunal Supremo que se espera que se haga pública el lunes. Quieren celebrar una gran manifestación el jueves a las 12 del mediodía en Barcelona, Tarragona y Girona, y una nueva concentración viernes, coincidiendo también con la huelga general convocada por la Intersindical-CSC y la IAC. Asimismo, instan a detener las clases en el momento que se conozca la sentencia, saliendo a las plazas de todas las capitales de provincia a las 20 horas de ese día. «La única manera de vencer es a través de la movilización de masas y con una estrategia combativa», avisan.
Según el sindicato, la sentencia tiene un objetivo muy claro: «aplastar las aspiraciones de cambio social profundo del pueblo de Catalunya». Aseguran que es una respuesta a la «victoria» del 1-O y en las decenas de movilizaciones masivas de los últimos años «con el objetivo mayoritario de romper con la monarquía y el régimen del 78, atrás los recortes de la derecha española y catalana, acabar con la pesadilla de los desahucios y la precariedad laboral y poner fin a las sentencias machistas y patriarcales «. «Hemos provocado la crisis más importante del régimen capitalista del 78 en cuarenta años», concluyen los estudiantes.
Tras constatar que ahora comienza una fase «determinante», el sindicato remarca que la sentencia significará un «antes y un después», y recuerdan que «ya se ha iniciado una nueva ofensiva del Estado contra los derechos democráticos» con el encarcelamiento de siete miembros de los CDR acusados de terrorismo.