Condenados a medio año de prisión a dos guardias civiles por robar 8.000 euros a un diplomático árabe, aprovechando su cargo en el aeropuerto de Ibiza.
Una pena que ha quedado rebajada después de que sus defensas hayan llegado a un acuerdo con la Fiscalía por el que han reconocido los hechos y se ha evitado la celebración del juicio. A ambos se les ha impuesto la inhabilitación como agentes de la Guardia Civil únicamente durante el tiempo de la condena.
Los hechos se remontan al 2015, cuando el representante de Arabia Saudita en Francia estaba en el aeropuerto de Ibiza. Allí, un agente de seguridad lo paró por llevar 47.000 euros en un sobre y los guardias civiles maniobraron para engañarle y robarle una parte del dinero aprovechándose de su posición.
Un Policía Nacional a prisión por pasar datos a narcos gallegos hasta tres veces
Por otra parte, un policía español se enfrenta a cuatro años de prisión por ayudar reiteradamente a la organización criminal contra la que tenía que actuar por traficar con drogas. También se pide para él una multa de cerca de 6.000 euros y su inhabilitación durante ocho años.
Fué el agente Carlos Gómez González, que trabajaba precisamente para la Unidad Central de Droga y Crimen Organizado (UDYCO) cuando ocurrieron los hechos. La Policía Nacional puso en marcha una operación denominada Agua Dulce que llevó a cabo la sección GRECO Galicia de la Policía Nacional para tratar de interceptar a una organización criminal que trataba de introducir cocaína en España.
No sólo no habría hecho su trabajo, sino que habría ayudado a la organización criminal contra la que tenía que actuar por intentar pasar droga en la península para no ser descubierta en el 2013. La Fiscalía solicita cuatro años de prisión para ese policía raso «por un presunto delito de revelación de secretos continuado», según su portavoz.