La justicia politizada española quiere escarnio. Más con una presa «mayor». La Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha rechazado la posibilidad de enviar a la Audiencia Provincial de Barcelona la causa que se sigue contra el mayor de los Mossos d’Esquadra Josep Lluís Trapero y la intendente Teresa Laplana y ha confirmado su competencia para enjuiciar su participación en el ‘procés’, según informan en fuentes jurídicas.
La Sala se pronuncia después de que la defensa de ambos acusados, que serán juzgados a partir del 20 de enero, presentase un escrito ante la Sección Primera instando a que Fiscalía se pronunciase antes del juicio sobre el delito por el que les va a acusar, pues el cargo inicial contra Trapero es el de rebelión, pero el Tribunal Supremo condenó a los líderes independentistas de sedición y según esa misma sentencia, el papel del jefe de los Mossos fue «un añadido».
Su defensa, quería este pronunciamiento previo al juicio oral tanto para garantizar el derecho de defensa como para poder cuestionar la competencia de la Audiencia Nacional para juzgar a Trapero, ya que entiende que si se le acusa de sedición en los términos en los que el Supremo ha definido el delito -con el fin de sentar al Gobierno a negociar, que no de subvertir el orden constitucional-, la instancia competente sería la Audiencia Provincial.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional contestó la semana pasada que este no es el momento procesal oportuno para pronunciarse a este respecto y que el delito objeto de su acusación se dará a conocer una vez iniciado el juicio, en la fase de cuestiones previas, tal y como corresponde de acuerdo a la normativa.
Ahora, la Sección se pronuncia además sobre el posible conflicto en la competencia, y según las fuentes jurídicas consultadas, en línea con la decisión adelantada por La Razón, rechaza la posibilidad planteada por la defensa de Trapero y acuerda que el mayor de los Mossos sea juzgado en esta instancia.
