La España del Una, Grande y Libre. La de la catalanofóbia más casposa. La diputada de Coalición Canaria (CC) en el Congreso, Ana Oramas, ha trasladado este martes al Jefe del Estado el «horror» que supondría que el futuro Gobierno de Pedro Sánchez dependa de ERC, un partido al que le trae «al pairo» España, pero no ha avanzado cuál sería el sentido de su voto porque falta información para que su fuerza política adopte una decisión.
En la rueda de prensa posterior a la ronda de consultas abierta por el Rey, Oramas ha mostrado a Felipe VI su «enorme preocupación» porque el PSOE no haya hablado ni siquiera con el PP, por que el «único» partido con el que esté negociando sea uno al que le trae «sin cuidado» la estabilidad del país y porque tampoco se conozca todavía el acuerdo suscrito por Pedro Sánchez y Pablo Iglesias para un Gobierno de coalición.
Catalanofóbia carca nacionalista
«Es un disparate que la estabilidad del país esté pendiente de si tiene inmunidad un líder político catalán o no, de si la Fiscalía recurre o no las medidas penitenciarias de unos presos en cárceles catalanas, de si hay o no elecciones en Catalunya, o de si se procesa o no a alguien», ha denunciado.
Oramas, quien ha recordado que en febrero se cumplirá un año con un Gobierno en funciones, sostiene que Sánchez no sólo debe conseguir sacar adelante la investidura sino que lo que necesita es garantizar la gobernabilidad del país sin estar cada día pendiente del voto de los independentistas catalanes.
Para ello ha defendido que hacen falta «consensos y diálogo» entre los principales partidos políticos, por lo que ha dicho esperar que después de la ronda de consultas del Rey, Sánchez «se digne» a entrevistarse con «todos» para explicar qué quiere hacer y cómo lo quiere hacer.
Espera negociaciones «serias» en próximas fechas
En este punto, la nacionalista canaria se ha mostrado «optimista» y ha dicho que confía en que «en las próximas fechas» se puedan retomar negociaciones «serias» en las que se ponga el interés de España por encima de los intereses partidistas.
Pese a la insistencia de los informadores por saber por dónde podría ir el voto de CC en la hipotética investidura de Sánchez, Oramas ha reiterado que, a su juicio, sería un «disparate» que la gobernabilidad dependa de unos «tipos» a los que no les importa el país y que esta opinión la trasladará cuando corresponda a la dirección del partido, que será la que adopte una decisión a este respecto.
Pero, de entrada, ha subrayado que hasta el momento CC sólo sabe que de no formar gobierno con Iglesias se ha pasado Sánchez a «darse un beso en la boca» y que los socialistas quieren diálogo pero que sólo están negociando con ERC.