Acaba la última semana política del año de manera tensa. La Abogacía del Estado mantiene en vilo la actualidad política española a la espera del informe requerido por el Tribunal Supremo tras la decisión de Luxemburgo sobre la inmunidad de Junqueras.
Y en medio del huracán político, la Asociación de Abogados del Estado, que representa a la práctica totalidad de los abogados del Estado españoles, ha dado un paso adelante para defender su autonomía y ha emitido un comunicado en el que aseguran que «rechazan cualquier intento de injerencia o presión» que tenga por intención desvirtuar el ejercicio de sus funciones.
Es la primera vez que este cuerpo se pronuncia sobre posibles presiones por parte del Gobierno. «Ante las recientes informaciones publicadas», dice el comunicado, la Asociación «rechaza cualquier intento de presión y especialmente de amenaza que tenga por finalidad desvirtuar o condicionar el ejercicio de las funciones de la Abogacía del Estado».
En un comunicado sin precedentes, los Abogados del Estado niegan así las injerencias de las que se ha acusado al Gobierno para que el informe que tiene que emitir favorezca la investidura de Pedro Sánchez. El PSOE y ERC siguen enfrascados en las negociaciones para que los republicanos faciliten que el líder socialista sea de nuevo presidente del Gobierno.
Aún no hay fecha para la investidura -aunque el Ejecutivo en funciones no descarta que se logre antes de Reyes- pero depende en gran medida de este escrito, una decisión en la que ERC espera ver «un gesto» que facilite el diálogo y, por tanto, el sentido de su voto.