Barcelona afronta este jueves su primer día laborable después de la entrada en vigor este 1 de enero de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) Rondas de Barcelona, que prohíbe la circulación en su interior a los coches considerados contaminantes -sin etiqueta ambiental de la Dirección General de Tráfico (DGT)-, lo que afectará a unos 50.000 vehículos, un 20% de todo el parque móvil de la capital catalana.
La restricción de los vehículos más contaminantes se hará de lunes a viernes, días laborables, entre las 7 y las 20 horas, y la ZBE establece un área de 95 kilómetros cuadrados que incluye los municipios barceloneses, totalmente o parcialmente, de Barcelona, L’Hospitalet de Llobregat, Cornellà de Llobregat, Esplugues de Llobregat y Sant Adrià Besòs.
La red de transporte público prevé absorber cerca de 170.000 desplazamientos diarios más por la entrada en vigor de la ZBE, 137.000 de los cuales corresponden a trayectos de vehículos privados -87.000 por entradas y salidas de la zona restringida, y cerca de 50.000 son internos-, según la Autoritat del Transport Metropolità (ATM).
Cámaras de Control
El Ayuntamiento de Barcelona ya ha instalado las 36 primeras cámaras que controlarán la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) del total de 66 que tendrá la ciudad a partir del 1 de abril, y aparte del resto que estarán distribuidas en el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), llegando en total a unas 200 en toda la ZBE.
Las cámaras registrarán y contrastarán la información de las matrículas con la base de datos de los vehículos sin etiqueta de la Dirección General de Tráfico (DGT), unos datos que se solaparán con la información procedente de la AMB de los vehículos autorizados, y las matrículas detectadas que no tengan permiso de circular recibirán una sanción.
Los conductores de los coches contaminantes que necesiten entrar puntualmente dentro del área de la ZBE podrán pedir hasta 10 autorizaciones al año, un permiso que expedirá el AMB y que costará dos euros por autorización, y, en el caso que se deba entrar en la ZBE por una urgencia médica y no se disponga de permiso previo, se podrá solicitar durante los tres días siguientes de coger el coche o moto.
Sanción Automática
El Centro de Control de la ciudad -que ya acoge las cámaras de movilidad de Barcelona- tendrá centralizado el control de estos dispositivos, aunque el proceso de sanción será automático, ya que los infractores recibirán directamente la multa, ante la que podrán poner alegaciones y obtener una reducción si la pagan anticipadamente, como el resto de sanciones.
Estas cámaras -que tienen luz infrarroja para garantizar la visibilidad también de noche, y que seguirán funcionando en caso de corte eléctrico- están dotadas con la última tecnología.
También los extranjeros
También las matrículas extranjeras serán leídas, y en la frontera los vehículos recibirán información de esta restricción para que, cuando alcancen Barcelona, hayan podido inscribirse en el registro electrónico para circular con la exención de diez días, ya que sino tendrán la «sanción correspondiente».
Aunque la norma entra en vigor el 1 de enero, hasta el 1 de abril habrá un periodo de transición a través de notas pedagógicas enviadas a quienes más reiteradamente incumplan la norma, no a todos los infractores, y que consistirá en un aviso.
Sanciones y Seguimiento
La ordenanza aprobada incluye la propuesta de ERC para que las personas que acrediten unos ingresos económicos inferiores al Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (Iprem) -de 537 euros al mes en 2018- más un 10% y que necesiten su vehículo de forma «indispensable» para trabajar podrán beneficiarse de un año de moratoria en la ZBE.
También se ha ampliado el listado y tipos de vehículos que presentan servicios «singulares», como blindados, vehículos taller y laboratorio, adaptados a la venta y exposición de libros, condicionados para la venta de artículos, grúas de arrastre o elevación, y vehículos para ferias y hormigoneras, entre otros.
Las sanciones serán de 100 euros las leves, de 200 las graves y de 500 las muy graves, y se incluye un criterio de reiteración de 90 minutos, y cualquier coche sancionado que después de 90 minutos siga circulando por la ZBE puede volver a ser multado, aunque se prevé que personas con movilidad reducida, enfermedades y en tratamiento médico periódico puedan circular sin restricción.
El Ayuntamiento ha diseñado con expertos y científicos una metodología de análisis y seguimiento de la medida junto con otras administraciones, que se realizará a través de resultados de estaciones de vigilancia y control y otros indicadores de movilidad y de campañas de medida que se harán periódicamente en la ciudad.