Otra noticia en forma de exclusiva desde Las Repúblicas. Es notorio que España no cuenta en Europa (los multiples escándalos, entre otros, ayudan a ello) No cuenta para nada de lo importante en política, económia, justicia, defensa, etc,. y si Catalunya se va, menos aún. Entremos en contexto…
Según indicaba este pasado Junio la Ministra de Defensa, Margarita Robles, España se sumaba al programa FCAS -Futuro Avión de Combate de 5ª Generación Europeo- con una participación anunciada “de igual a igual con los socios alemanes y franceses”, en el que participaba a partes iguales del 33% -o eso nos habían vendido-, con un aportación inicial de 110 millones de euros al proyecto, y listos para aportar otros tantos millones.
Todo mentira, como sospechábamos e indicamos desde las Repúblicas, en su momento, pura falacia. España solo pondrá el dinero que los otros le digan y alguna colaboración tecnica muy a posteriori del proyecto por parte de Indra (vinculada al Gobierno -SEPI-) y poco más. Cero puestos de trabajo, cero inversiones, cero riqueza para España… cero patatero. Aunque vendan humo. Además, la factoria sevillana que fabrica el Airbús A400 de Sevilla peligra y se la quieren llevar a Toulouse, Francia, como tambien informamos aquí.
Los Gobiernos de Francia y Alemania han adjudicado a Dassault Aviation, a Airbus y a sus socios MTU Aero Engines, Safran, MBDA y Thales el contrato marco inicia (Fase 1ª), lo que representa el lanzamiento de la fase de demostrador del Futuro Sistema Aéreo de Combate (FCAS). En el que había quedado absolutamente reflejado que solo serían empresas de esos dos paises.
No sabemos que intentaba vender Defensa, pero ‘solo’ esas empresas involucradas desarrollarán conjuntamente el proyecto. Nada de 3 partes iguales, al «33%» que decía orgullosa Margarita Robles. El siguiente paso destacado del programa FCAS será entonces cuando cuentan con la incorporación de España y la participación de un nuevo grupo de suministros a partir de la Fase 1B, que se iniciará cuando la Fase 1ª, entre francesces y alemanes, haya finalizado con éxito.
Pero aún va a ser peor. Alemania, Francia y Polonia son el nuevo “liderazgo” europeo, continental, tras el Brexit, convirtiendo sus encuentros como el teatro de influencias estratégicas que han dejado a España en total fuera de juego. Una vez más, nuevas alianzas europeas, que dejan ‘aislado’ al Gobierno de turno español, en este caso el de los socialistas de Sánchez, por no tener credibilidad en nigún ambito.
Hace solo unos días, el presidente francés se desplazó a Polonia y abogó por un nuevo directorio como eje vertebrador del club europeo, a través de cumbres periódicas del denominado triángulo de Weimar, con esos tres paises. Van a reunirse para hablar en profundidad en temas de vital importancia estratégica, económica, industrial, seguridad, etc.
Pero, contra todo pronóstico, esta marginación no preocupa al Gobierno de coalición entre Pedro Sánchez y Unidas Podemos. Creen que España puede hacer pactos con terceros países individuales’ ad hoc’, o sea según necesidades. Ridículo, no funcionó con el PP, y no va a funcionar ahora. El ejemplo del del FCAS lo demuestra.
Lo que da a entender es el Gobierno español, aunque venda lo contrario, a pesar de haber el puesto vacante de otro grande, el Reino Unido, cuenta cada vez menos en Europa, sino es como país pequeño. No le van a llamar para participar como miembro activo e influyente en el nuevo club de las grandes decisiones europeas, que será el del eje Berlín, París y Varsovia. Es lo que hay.
