Escandaloso chantaje al Estado. Florentino Pérez exige días después de aprobar un reparto de dividendos millonarios de 875 millones de euros, la prologanción de tramos de autopistas de peaje que están a punto de expirar, con la excusa de la pandemia. A pesar de la prudencia pedida por la misma Unión Europea a las grandes empresas, por lo que necesita el alargamiento para garantizarse el reparto del dividendo millonario
Según avanza el diario ARA la presión la están haciendo la empresa de Florentino Perez, accionista mayoritario junto con la italiana Atlantia ante el gobierno de Pedro Sánchez y ante los grupos parlamentarios para conseguir o un nuevo decreto o la presentación de enmiendas.
Abertis no ha tenido pérdidas en la descarga del tráfico, pero necesita decirlo para garantizar el reparto del dividendo millonario. Son las llamadas enmiendas del Ibex que se introducen a cambio de favores de las grandes empresas. No alargar la concesión le podría hacer perder valor a las agencias de rating.
El 1 de septiembre de 2021 se han de levantar las barreras de los peajes de la AP-7, AP-2 y C-32. Es decir los tramos, Tarragona-La Jonquera, Barcelona-Zaragossa y Barcelona-Palafolls, las autopistas más rentables del estado y que los catalanes principalmente han pagado durante más de 40 años.
Así, si la compañía consigue que alarguen sus contratos de los peajes de la AP-7 (Tarragona-La Jonquera), la AP-2 (Barcelona-Zaragoza) y la C-32 (Barcelona-Palafolls) no acabarían el 1 de septiembre del próximo año, como está previsto, sino más adelante. Las Repúblicas ha consultado a uno de los miembros de Autopistas, que prefiere no dar su nombre por la tensión existente con los ERES, en el que confirma los rumores de la prolongación hasta diciembre.
La compañía ha contactado tanto con el mismo Gobierno como con los partidos en el Congreso, por si los decretos que regulan las compensaciones pasan a ser proyectos de ley modificados que tendrían enmiendas y, por tanto, habría capacidad de incidencia por parte de las formaciones políticas.
Reclamar pérdidas e intentar repartirse 875 millones de euros, es algo inaudito. Sería un escándalo si el gobierno del PSOE y Podemos acepta este chantaje. El grupo de Florentino presióna a los grupos parlamentarios de manera escándalosa con coacciones. Habrá que estar atento a la situación, para ver qué partidos aceptan este sucia extorsión de la empresa del siniestro Florentino Pérez.