El Gobierno progresista en España ha durado, lo que dura su palabra. Ante la primera excusa, Podemos tiende la mano a Inés Arrimadas para sortear los reivindicaciones de ERC en la situación de emergencia, y encima blanquean interesadamente la estructura del ejecutivo naranja: «Es un nuevo Ciudadanos» comentan en la formación de Iglesias. Sí, hasta que sea el PP el vuelva a gobernar de nuevo y esté de vuelta a los ‘orígenes’ según necesite Casado. No hay remedio.
Pablo Iglesias acepta con condiciones el acercamiento de Pedro Sánchez a Ciudadanos para la cuarta prórroga del estado de alarma. El plan del Gobierno es mantener durante varias semanas la situación de excepcionalidad, y tras el aviso del Partido Popular y de Esquerra Republicana de Catalunya, ¿qué es lo facil?. pues acudir a un partido más extinguido que nunca, con el goteo en la marcha de afilidos de peso a otras formaciones, agonizante hasta su desaparición en las próximas elecciones.
No le ha costado mucho a la Moncloa convencer a Ciudadanos, pues. Por otro lado, Podemos, con sus 35 diputados, ve en esa maniobra una vía útil para salvar el Ejecutivo, siempre y cuando no afecte a la vicepresidencia social y al peso de los morados en el Gobierno. La cúpula morada concluye que sin el respaldo del Congreso al estado de alarma el Gobierno se vería herido de muerte. Y en ese contexto aboga por un armisticio con el partido de Inés Arrimadas aceptando por la vía de los hechos los movimientos de Sánchez. Todo por España. ¿No lo intuia ERC?
Los de Iglesias descartan posturas radicales ante el intento de Sánchez de salir de un cul de sac generado por los gestos de vaiven de ERC [recuerdan a los que hacia Jordi Puyol en tiempos de Aznar]. La buena señal para Podemos es que, según afirman fuentes del partido, Ciudadanos no está pidiendo una remodelación del Ejecutivo tal y como podría hacer el PP, ni que Iglesias renuncie a la vicepresidencia social. “No están en este plan. Es un nuevo Ciudadanos, alejado del PP y Vox, que están echados al monte”, al estilo ‘campi qui pugui’ (salvese quien pueda), aunque en Podemos lo vean diferente y ya hablan de “mano tendida”. ¡No conocen a la Arrimadas!