La presidenta estatal de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha estado aletargada durante la mayor parte de la pandemia. Se encontraba absolutely missing. Ni una voz ni propuesta, ni un consejo, ni un sintoma de ayuda a la crisis sanitaria, ningún contacto con el gobierno ni Sánchez en bastantes semanas, como bien ha dicho ella en varias ocasiones.
Tras salir de la cueva, ayudo al Ejecutivo a prorrogar quince días más el Estado de Alarma. Ahora considera una «mala noticia» que el Gobierno dependa de ERC, de cara a la siente prórroga del estado de alarma. En declaraciones a Telecinco este viernes, la líder del grupo naranja afirmó que es «malo» para España que las condiciones sobre «algo tan importante» las pongan los republicanos, que reclaman contrapartidas a favor de los presos, «cosas nacionalistas» y la «tabla de chantaje» -sobre el espacio de diálogo entre gobiernos.
Arrimadas, en cambio, una vez su dosis reafirmante de catalanofóbia, ha insistido en que Cs siempre pide «algo bueno para los autónomos y todas las familias». En este sentido la diputada ha instado al presidente español, Pedro Sánchez, a dialogar con Cs: «Estamos dispuestos a hablar, por el bien de los españoles».
Arrimadas ha añadido que si Sánchez deja que las condiciones las ponga ERC es que el presidente español «lo quiere». Así, reiteró que «será positivo» si se puede evitar que el grupo de Gabriel Rufián marque el «rumbo político» de España. La jefe de filas de Cs ha aseverado que el Ejecutivo español deberá dar explicaciones si sigue permitiendo los «chantajes» de ERC.
Por otra parte, Arrimadas cree que la siguiente prórroga de estado de alarma también debe ser de 15 días -como hasta ahora-, y no de 30 días, tal como estudia la Moncloa».
