Una de las hipotéticas máximas de la Casa Real en los últimos años, para cumplir con un mínimo de decencia moral entre sus vasallos ha sido la de intentar hacer la institución más transparente, sobre todo a nivel de gastos. Ayer comentabamos los gastos en la Casa del Rey de 31.000€ por hacerse unas simples fotos, hoy el exceso en una sola cena.
Saben en La Zarzuela que los escándalos protagonizados por algunos de sus miembros han hecho y están haciendo mucho daño a la corona, que demuestra lo que es, una maquina de generar dinero con ‘negocios’ ilegales muy del estilo Borbón. Especialment el patriarca y rey emérito Juan Carlos I. De igual manera los relacionados con Iñaki Urdngarin hace poco.
Es por eso que, desde hace ya un tiempo, desde que Felipe VI asumió el trono, se quiere dar la imagen de ‘normalidad’ y que la Casa Real haga públicos los contratos a los que llega con diferentes empresas para diferentes servicios. Aunque se conozca que hay partidas que se siguen ocultando.
En este sentido, pese a que aún no se han dado a conocer los presupuestos para este 2020, sí que se conocen ya los gastos de los últimos meses del pasado año como advertiamos ayer. Y ojo porque hay sorpresas que han dejado a muchos con la boca abierta. Más en la precaria situación economica por la crisis sanitaria de la mayoría de españoles.
La comida de más de 38.000 euros
Entre ellos, uno que llama mucho la atención es el gasto de 37.980 euros, que fue lo que la Casa Real pagó al catering para la recepción del día de la Hispanidad. Fue concretamente la empresa de catering M. Difusión y Catering la que se encargó del evento. Cifra, como es lógico, que muchos encuentran fuera de lugar.
Un brutal gasto que no se llega a entender, a no ser que el gran número de comensales e invitados así como el nivel de la comida y bebida servidos ese día, sea solo un golpe de teatro para blanquear a la Monarquia española y agradecer a sus vasallos los servicios prestados.
Es evidente que, como bien apuntan sobre todo los republicanos o los antimonárquicos sin más, que hay muchos gastos que son “escandalosos”. Que esta institución anacrónica ya no tiene razón de ser, por lo que esos 8 millones que cuesta mantenerla ahora deberian dedicase a otra cosa.
Muchos recuerdan ahora las palabras que dijo Felipe VI el día en el que asumió el trono: “La Corona debe buscar la cercanía con los ciudadanos, saber ganarse continuamente su aprecio, su respeto y su confianza; y para ello, velar por la dignidad de la institución, preservar su prestigio y observar una conducta íntegra, honesta y transparente, como corresponde a su función institucional y a su responsabilidad social”. Nada de ello se ha cumplido, tenemos desde su llegada, escándalo tras escándalo.