La deriba facistoide en España tiene sino de sacar lo peor de si misma. La mentalidad pro franquista ha estado medio aletargada durante años, pero ahora ni los que han jurado respeto y orden a las instituciones del Estado se esconden. Es lo que le ha sucedido a Rafael Muñoz Leonisio, que nunca ha dejado de mostrar a nadie en la ciudad en la que reside como piensa, pero esta semana ha saltado a la palestra nacional de la mano del El Puerto Actualidad, que se ha hecho eco de su amplio exhibicionismo político y su activismo contra el gobierno central.
Aunque las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad tengan ‘prohibido’ hablar de política, Rafael Muñoz, nunca ha ocultado su tendencia política, y de hecho de cara a las últimas elecciones municipales hizo abierta campaña por el Partido Popular, apoyando contra viento y marea al actual alcalde, Germán Beardo, que gobierna desde hace un año sin mayoría, en pacto con Ciudadanos. La desvergüenza, no obstante, se ha desatado ahora por su participación activa en las caceroladas que se han venido celebrando en contra de la gestión del Gobierno durante la pandemia.
Y no es que solo haya participado, sino que a través de sus redes sociales ha animado a sus seguidores a manifestarse, en unos actos que no contaban siquiera con el permiso de la Subdelegación del Gobierno. También han proliferado en sus redes sociales durante las últimas semanas los insultos contra los miembros del Gobierno, llamando incluso «hija de puta» a la ministra María Jesús Montero, entre otras lindezas. A Fernando Simón, director de emergencias sanitarias que da las comparecencias pot TV, le llama «Loco Simón».
En su Facebook hizo unas despectivas afirmaciones tras la concentración celebrada en la plaza de Peral tras los buenos resultados de Vox en las elecciones autonómicas: «Esta tarde 70 piojosos han estado ladrando en la plaza Peral en contra de la democracia, al más puro estilo leninista bolivariano. Al terminar los ladridos se ha procedido a fumigar la plaza para evitar contagios a la ciudadanía», decía el post en cuestión. Dirigiendose a Pablo Iglesias: “yo me voy a cagar en toa su puta madre, comunista de mierda«. Así está España y así se lo contamos.