Fiel estilo de la economía #MarcaEspaña. En este caso no entender como hace los números el Gobierno de Pedro Sánchez. ¿No lo sabía, no lo intuia, o mentía? Con las medidas propuestas esta semana, la Comisión Europea (CE) ha dado al traste con los planes del Gobierno de incrementar su recaudación con nuevos impuestos como la ‘Tasa Google’, con la que el Ejecutivo de Pedro Sánchez tenía previsto ingresar 850 millones de euros al año para las arcas públicas. El bofetón ha sido tremendo.
Hay que recordar que el proyecto de ley de este impuesto se encuentra en tramitación parlamentaria, y una vez aprobado gravará con un 3% a las empresas que facturen 750 millones de euros a nivel global e ingresen 3 millones en suelo español, por actividades como la publicidad online, la intermediación en línea (la comisión de intermediación y las redes sociales) y los servicios de transmisión de datos.
Como siempre España no ha querido esperar a que se llegara a un consenso en el seno de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) para imponer un impuesto conjunto y homogéneo en todos los países que son miembros de esta organización, pese a las amenazas del presidente estadounidense, Donald Trump, pero ahora Bruselas le ha advertido que ya tiene un plan para este impuesto.
En concreto, la Comisión Europea ha propuesto la creación de un Fondo de Recuperación de 750.000 millones de euros para ayudar a todos los países de la UE a hacer frente a la crisis que ha provocado el coronavirus. Este dinero se financiará con deuda emitida por la Unión, pero hará falta dotar de más recursos al presupuesto comunitario para poder afrontar en el futuro el pago de esas deudas. Otra más de Sánchez.