En el último episodio recordábamos que el Rey emérito Juan Carlos I de Borbón para guardar sus trofeos mandó construir su propio pabellón de caza en la Zarzuela, donde también se encuentran algunos de sus ‘trofeos’ de mayor envergadura como jirafas, rinocerontes o elefantes.
Donde el complejo, de dos plantas y casi 2.000 metros cuadrados en total, costó 3,4 millones de euros que derivó a Patrimonio Nacional -esto es, al erario público-. A día de hoy, la operación sigue sin aparecer en el Portal de Transparencia. La tradición Borbónica de poseer cuantos más inmuebles mejor siguió con el ahora emérito.
Pero en este último, con el que se acaba la serie, sobre sus ingresos, propiedades, de su patrimonio en concreto, pasaremos solo por encima, porque a partir de aquí ya se está más al día con los vaivenes de sus opacos negocios, su chanchullos reales, y sus blanqueos de capitales varios, mar allende y tierra mediante…
Ya entrados los años 90, el banquero Mario Conde fue condenado por la desaparición de 600 millones de pesetas en el marco del ‘caso Argentia Trust’. El dinero fue a parar a una cuenta bancaria en las Islas Caimán que, según Conde, estaba gestionada por miembros del Gobierno y el rey Juan Carlos.
Conde fue condenado por la Audiencia Nacional en 1997 por el caso Argentia Trust, quedando probado que en 1990 mandó hacer la susodicha transferencia millonaria. Durante años, Conde insinuó que ese dinero había ido a parar a terceras personas relacionadas con el Gobierno y la Casa Real por los pagos de unas supuestas comisiones a cambio de favores para facilitar la salida a bolsa de Banesto.
Desde que abdicó en 2014 ha recibido 956.172 euros como rey emérito. En marzo de 2020, el rey Felipe anunció que le retiraría su asignación. Por lo que su último salario anual como rey fue de 292.752 euros, más del doble que el de su hijo. Estos son más de 820 euros al día, para gastar, en un momento dado.
Su sueldo dependía del Estado y aparece reflejado en la Constitución. Durante su reinado, también fue libre para designar a los miembros civiles y militares que trabajaban con él en Casa Real, con sueldos de alrededor de 100.000 euros. En total, desde el inicio del presupuesto para Casa Real (1979) hasta su abdicación, recibió 8,3 millones de euros anuales por parte del Estado.
En realidad, su asignación es mucho mayor, ya que la oficial de 8,3 millones sólo cubre los sueldos de la administración de la Casa y los miembros de la Familia Real, pero no sus «gastos derivados» ni las partidas que los ministerios derivan a la realeza como «respaldo de la jefatura de Estado», ya que no están sujetas a la Ley de Transparencia.
Esto le convierte en el tercer miembro de la realeza más rico de Europa, sólo por detrás del Gran Duque Henri (Luxemburgo) y el príncipe Hans Adam II (Liechtenstein)… y le hace más rico que viejos conocidos como el emir Tamim Bin Hamad Al Thani, de Qatar… y que el rey de Marruecos, Mohamed VI. Aquí las 10 primeras.
No obstante, la mayor parte de su dinero se considera a partir de su patrimonio y no de su fortuna personal. Antes de abdicar, esta rondaba los 550 millones. Desde entonces, su patrimonio estimado habría crecido en medio millón de euros, según estimaciones.
También habría que sumarle la multitud de bienes de la Casa Real de la que continúa siendo beneficiario, como los 8 palacios reales… el más conocido es el Palacio Real de Madrid -también conocido como Palacio de Oriente, en tiempos del dictador Franco-, que consta como residencia oficial aunque los reyes vivan en la Zarzuela.
Felipe cuenta además con las dependencias de El Escorial, El Pardo, Aranjuez, La Granja de San Ildefonso o la Almudaina, entre muchos otros…. y sus muchos conventos y monasterios. Con el patrimonio de los Borbones amasado por parte del patriarca de los Borbones se acaba este recopilatorio. Pero seguiremos informando con noticias con lo que haya podido ‘amasar’ en diferente países, especialmente en los últimos tiempos…