El Gobierno socialista presidido por Pedro Sánchez, impulsará antes de que finalice el año una nueva ley de secretos oficiales que, entre otros objetivos, busca promover la desclasificación de documentos oficiales. La propuesta de la que parte el Ejecutivo, según ha podido saber este diario de fuentes conocedoras de la iniciativa, es que se puedan desclasificar los documentos históricos hasta diciembre de 1978, coincidiendo con la ratificación de la Constitución.
Saldrían así a la luz los documentos secretos relacionados con la Transición, incluyendo episodios represivos como los sucesos de Vitoria o los Sanfermines de 1978 con los que se pretende realizar un guiño al PNV, que lleva batallando desde 2016 para que se reforme la ley de secretos oficiales que data de 1968 y cuya última reforma se produjo hace más de 40 años. Sin embargo, se quedarían fuera de estas desclasificaciones otros episodios en los que ponían el foco los nacionalistas vascos, principalmente los GAL.
La intención del Gobierno pasa por negociar previamente con el PNV el desarrollo de la nueva ley, dado que se encuentra en tramitación una propuesta del grupo vasco para reformar la actual norma sobre secretos oficiales heredada del franquismo. Un asunto que abordaron, según indica elConfidencial, esta misma semana, durante una reunión en el Congreso, la vicepresidenta segunda y ministra de Relaciones con las Cortes, Carmen Calvo, y el portavoz del PNV, Aitor Esteban, según fuentes conocedoras del encuentro.
Calvo le confirmó que el Gobierno promovería una nueva ley, aunque sin entrar a concretar sobre su contenido. Los nacionalistas vascos defienden como punto de partida su proyecto de reforma, priorizando que se tramite al entender que la iniciativa del Gobierno se queda corta.