Vergonzosamente la inhabilitación de Quim Torra ha forzado el calendario electoral en Catalunya, paralizado por la pandemia del coronavirus, y el president del Parlament, Roger Torrent, como ya es sabido, ha fijado fecha para las elecciones en caso de no haber un debate de investidura previo: el 14 de febrero. Aunque el porcentaje de votantes a fecha de hoy es nada menos que un 19,3%, se prevé pueda cambiar paulatinamente.
Estos primeros datos vienen de Madrid: NC Report ha elaborado una encuesta para el partido españolista La Razón en la que otorgan la victoria de nuevo al bloque independentista. Esquerra Republicana (ERC), cosecharía 35 escaños con un 23,2%. JxCat sería segundo con 31 diputados y un 20%. Así las cosas, en el bloque soberanista los republicanos catalanes sumarían tres diputados en detrimento de Junts, que perdería la misma cifra.
Arrastrados por tendencia nacional el PSC-PSOE tiene un reseñable repunte que le convierte, de hecho, en la fuerza política que más sube en Catalunya. Así el PSC completaría el podio con 25 diputados y un 17,8%, subiendo así en ocho escaños.
Por su parte, Ciudadanos se desplomaría escandalosamente de la primera a la cuarta posición, dejándose por el camino 20 escaños y sumando únicamente 16 con un 11,9% de los votos. Con lo que dejarían de ser la oposición, dejando ese papel a los socialistas de Miquel Iceta.
El que mejor partido saca a la catástrofe es el PP, que se lleva un 18,1% de los votos que tuvo Arrimadas en 2017. Así le sigue el PP con 10 (7,6%); y los Comunes con nueve (7,8%).
Cabe destacar y comparar los resultados de la CUP con Vox: la formación catalana independentista tendría 20.000 votos menos que Vox pero lograría el doble de escaños, 6 frente a 3. La CUP obtendría un 4,5% y seis escaños y la ultraderecha Vox solo tres con un 5%.
Como ya había pasado, aunque no en porcentaje de votos, y dado que la mayoría absoluta se sitúa en los 68 diputados, el bloque independentista seguiría ostentando la victoria.