La cadena humana desde la Estación de Francia de Barcelona, hasta el monumento a Colón al final de Las Ramblas, para protestar contra la presencia de Felipe VI, ha sido todo un éxito. Se esperaba al jefe del Estado, Felipe VI, en el acto de entrega de unos premios económicos, que se celebra justamente en la Estación de Francia en el marco de la Barcelona New Economy Week.
Entidades, partidos políticos independentistas y sindicatos han convocado esta acción para dejar claro a Felipe VI que «no es bienvenido y que Catalunya no tiene rey». Los Mossos han marcado un perímetro de seguridad alrededor de la estación, en medio de un fuerte dispositivo policial. La visita del Rey llega tras la polémica por haber anulado su asistencia al acto de entrega de despachos judiciales por la coincidencia con la sentencia contra Quim Torra y el 1-O.
En el acto con el Rey y el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, no hay ningún representante del Gobierno ni tampoco la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. El ejecutivo catalán esgrime el discurso «incendiario» de Felipe VI el 3 de octubre de 2017, mientras que Colau no va por los casos de presunto corrupción que salpican la monarquía española.
Los participantes de la cadena humana se reparten entre una decena de tramos para evitar aglomeraciones y poder cumplir con las medidas sanitarias y de seguridad derivadas de la Covidien-19.
Las entidades y partidos que convocan la acción son Òmnium Cultural, la Asamblea Nacional Catalana, JxCat, ERC, CUP, USTEC-STEs, la Intersindical-CSC, IAC, Plataforma Pro Selecciones Deportivas Catalanas, CIEMEN y Derechos.
Por su parte, los CDR también ha convocado una protesta por alrededor de la Estación de Francia.
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