Fue la obra más mediática de ARCO 2019. Una escultura hiperrealista del rey Felipe VI titulada: Ninot (como los tradicionales muñecos que se queman en las Fallas de Valencia), de casi cinco metros de altura, cuya cabeza sobresalía por encima del stand de la galería milanesa Prometeo de Ida Pisani y que siempre tenía delante un enjambre de curiosos blandiendo sus teléfonos móviles.
Sus creadores (intelectuales, ya que la escultura la realizó el taller del artista fallero Manolo Martín), fueron los artistas Santiago Sierra y Eugenio Merino, cuyas obras suelen desatar la polémica por su contenido político. Su intención era venderlo antes que nada, pero aunque suene a broma, su destino, como últimamente con las imágenes del rey era sí o sí, la quema primero.
La escultura tenía un precio de 200.000 euros y su hipotético comprador habría tenido que firmar un contrato que le obligaría a quemarla en el plazo de un año. Aunque ha habido varios coleccionistas patriotas monárquicos interesados en la pieza, finalmente nadie se decidió a adquirirla, y esta ha permanecido guardada en un almacén.
Ante la falta de comprador, Sierra y Merino han elegido una fecha simbólica, este 12 de octubre, Fiesta Nacional de España, para quemar la escultura. Construida con materiales combustibles (cera, resinas, madera, tela y pelo natural), las llamas la han consumido hasta dejar solo una calavera ignífuga y unas cenizas, «completando así el proyecto artístico», anuncia Santiago Sierra en la descripción que acompaña al vídeo en su cuenta de YouTube.
Vídeo:
Redes y una fiel seguidora de Felipe VI y la Monarquía…
Un día en la vida de una monárquica. (No me pude resistir a hacer la pantomima) pic.twitter.com/stzgrAevB9
— Gara Santana (@garaS87) October 13, 2020