Ya ha pasado un año de la infame sentencia al Procés por el Tribunal Supremo. Un año después de ola de Tsunami Democrátic contra las condenas, hay 13 casos investigados de violencia policial durante las protestas y 16 agentes, Mossos y el CNP (Cuerpo Nacional de Policía) , investigados.
Entre las víctimas hay dos con pérdida de visión ocular debido al impacto de una pelota de goma o un proyectil de foam. Uno de ellos recibió el impacto en la protesta del aeropuerto de Barcelona.
Al margen de los daños físicos los abogados señalan que hubo un «alto nivel de humillación y vejaciones y voluntad de herir psicológicamente» por parte de los policías que actuaron.
Del total de 13 casos, 8 afectan a periodistas. Y en estos casos hay un total de 16 mozos y 7 agentes del CNP. En la mayoría de los casos las imágenes han sido clave para identificar los policías, pero hay dos que están pendientes de poder localizar el agente de las lesiones.
Hay que recordar que la sentencia farsa al Procés por el Tribunal Supremo fueron de penas de 9 a 13 años. El máximo para Junqueras y diferentes a los otros líderes, entre sedición y malversación. Los sentenciados por desobediencia quedaban en libertad, Vila, Borràs y Mundó.
El Supremo descartaba la rebelión, pero imponía penas de cárcel para el ex vicepresidente de la Generalitat, además de Romeva, Rull, Horno, Forcadell, Turull, Bassa, Sánchez y Cuixart, e inhabilitaba por desobediencia a los tres acusados en libertad.