Cientos de manifestantes en Nápoles se han enfrentado a la policía en las protestas que se han producido contra las restricciones anunciadas por el gobierno para frenar los contagios por COVID-19.
A través de las redes sociales se ha organizado la movilización en las calles para desafiar el toque de queda que entró en vigor en la región de Campania a finales de esta semana.
Italia ha registrado 20.000 casos positivos en las últimas 24 horas.
La mayoría de las personas que salieron a protestar en las calles son jóvenes. Se congregaron a partir de las 23.00 horas, justo cuando entraba en vigor el toque de queda.
El presidente regional, Vicenzo de Luca pidió la puesta en marcha de medidas de confinamiento más estrictas para contener la propagación del virus en la región de Campania, donde se registraron 2.300 casos durante las últimas 24 horas. En este sentido, dijo: «Estamos al borde de la tragedia, necesitamos un cierre nacional».