La Policía Nacional sigue con la represión de Estado. En este caso afirma que ha recopilado una serie de indicios que apuntan a que el abogado Gonzalo Boye cobró 10.000 euros en metálico por lavar dinero para el narcotraficante gallego Sito Miñanco. En un informe del 10 de enero de 2020, la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) sitúa al abogado como cerebro de una maniobra para intentar blanquear el origen de 889.000 euros que incautaron a la banda en febrero de 2017 en el aeropuerto de Barajas.
El sumario de la causa al que ha tenido acceso El Confidencial y parte del cual publica, ha informado de los detalles por los que se encuentra imputado el abogado que defiende la causa de diferentes lideres independentistas: «Fue el encargado de intentar recuperar ese dinero mediante la confección de unos contratos en los que se fingía la compraventa de unas letras de cambio«, explican. Pero en el documento aportado no se ve ni se entiende nada de lo que lucubra la policía.
La tesis de la Policía se apoya en las conversaciones que el abogado guardaba en una carpeta denominada ‘blanqueo de capitales’ y en una serie de manuscritos que fueron hallados el 5 de febrero de 2018, cuando registraron la casa de Luis Enrique García Arango, lugarteniente de Miñanco. Una hoja donde no se especifica de que se trata ese (10). Si de gastos por los servicios del Abogado o del pago de un menú por la dieta.
Según la versión de la Policia Nacional entre las funciones que su jefe le había encomendado, los investigadores subrayan que hacía de nexo «con las organizaciones exportadoras de sustancia estupefaciente en Colombia» y que supervisaba a los hombres de Miñanco en España, labores a las que se sumaba la de llevar «la contabilidad de la organización criminal».