El Ministerio del Interior español deberá indemnizar con 137.000 euros una familia de Almería a la que comunicó con veintidós siete años de retraso que su hijo, quien constaba como desaparecido, había perdido la vida en un accidente de tráfico.
La Audiencia Nacional estima parcialmente el recurso por responsabilidad patrimonial que solicitaba 304.000 euros de reparación, e indica que «a pesar de la dificultad de valorar los daños morales que han sufrido los reclamantes» procede indemnizar con 65.000 euros a la madre del fallecido, y con 18.000 euros a cada uno de sus cuatro hermanos.
La sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, insiste en la «excepcional duración del retraso» en identificar el cadáver y comunicar la muerte a sus familiares, y también remarca «la angustia y la incertidumbre por la falta de noticias sobre donde se encontraba «que se produjo durante» un periodo de tiempo tan dilatado».