Como se puede apreciar una vez más, no todos somos iguales ante la ley. La Infanta Elena se ha saltado el confinamiento para acudir a una misa realizada en la iglesia del Santo Ángel en Sevilla. Según revela ABC, quiso reconocer la labor de los monjes carmelitas durante el estado de alarma aplicado en el mes de marzo.
La hermana del rey Felipe VI, el jefe del Estado, no sufrió ningún impedimento para poder visitar a los monjes, y viajó desde Madrid a pesar de que Sevilla se encuentra cerrada y blindada perimetralmente debido a la alta incidencia de los contagios de coronavirus.
La hija del rey emérito Juan Carlos I ha querido mostrar su agradecimiento a los monjes de la iglesia del Santo Ángel tras decidir dar su misa desde la terraza del centro religioso mientras el resto de vecinos se encontraba en sus casas a causa del confinamiento domiciliario. Una excusa que no ha convencido a nadie.
No es la primera vez que ex miembros de la Casa Real se pasan el confinamiento por el arco del triunfo. La propia hija de Elena, Victoria de Marichalar, Viki para los amigos, suele escapar a Andalucía con asiduidad con su novio. También han habido quebrantamientos sobre el tema en Madrid y en diferentes situaciones.
