La Agencia Espacial Europea ha comunicado que después del despegue y tras el primer encendido del motor se identificó una desviación de la trayectoria. También llevaba el satélite francés «Taranis». Una desviación que ha supuesto la pérdida de esta misión, El cohete «Vega» de la Agencia Espacial Europea que transportaba el satélite español «Ingenio» y el francés «Taranis» se desvió de la trayectoria prevista solo 8 minutos después del despegue, según los últimos datos de la ESA.
La agencia espacial tenía previsto poner en órbita el satélite español «Ingenio» para la observación de la Tierra, considerado como uno de los hitos de la industria aeroespacial española, que ha liderado su construcción y que se iba a encargar durante los próximos años tanto del control de la misión como de las comunicaciones y del procesamiento de todos los datos que tenía que proporcionar.
El SeoSat (Spanish Earth Observation Satellite) o Ingenio era un satélite artificial español de observación de la Tierra que proporcionará imágenes ópticas multiespectrales de alta resolución a diferentes organismos, civiles e institucionales (militares) del gobierno español. Este satélite formaba parte del programa PNOTS, y estaba financiado por el gobierno español, quien mantiene responsabilidad total en el desarrollo financiero y programático.
Ingenio estaba destinado a tomar imágenes de la superficie terrestre con una impresionante resolución de hasta 2,5 metros. Sus fotografías serían utilizadas en múltiples aplicaciones en cartografía, control de cosechas, desarrollo urbano… Además, resultaría muy útil en el seguimiento de emergencias como inundaciones, incendios o terremotos. Una vez en órbita, el INTA asumiría el control rutinario de la misión desde su estación madrileña de Torrejón de Ardoz.
«Hay un 90% de posibilidades de que todo salga bien», aseguraban fuentes de la misión horas antes del lanzamiento. El parte meteorológico era bueno y las simulaciones también, pero la aventura falló a los ocho minutos de despegar. España habla de mala suerte. El proyecto costó 200 millones de euros y suponía un hito para la industria nacional.
«Trayectoria desviada en # VV17 después del primer encendido del motor Avum. Investigaciones sobre la anomalía en curso. Más por venir en breve.»
Trajectory degraded on #VV17 after first ignition of the Avum engine. Investigations on the anomaly ongoing. More to come shortly.
— Arianespace (@Arianespace) November 17, 2020