Según acaba de informar CNN, Georgia ha anunciado su auditoría estatal del recuento de votos en las elecciones presidenciales. Se confirma así oficialmente que la victoria en Georgia es para Biden y no hay rastro de fraude electoral, como habían denunciado los republicanos.
Biden ha vencido allí a Trump por 12.284 votos. Supone un ligero descenso para Biden en base a los datos que habían sido anunciados en un primer momento.
Ahora Georgia tendrá que confirmar estos resultados, en base a la legislación vigente. De esta manera, Brian Kemp, gobernador republicano de Georgia, tendrá que firmar todo el papeleo que supondrá la victoria oficial de Biden, reconociéndole los 16 electores por Georgia. Tiene hasta las 5 de la tarde de este sábado (horario de Georgia) para firmar la documentación.
A través de un comunicado, el republicano Brad Raffensperger, secretario de Estado de Georgia, ha indicado: «La primera e histórica auditoría estatal de Georgia confirma que el nuevo sistema de votación en papel es seguro y se han contado los votos con precisión». «Supone un gran crédito para el arduo trabajo que han llevado a cabo nuestros funcionarios electorales locales y del condado, que se movieron rápidamente para emprender y completar una tarea trascendental en un corto período de tiempo».
Por su parte, Donald Trump, ha continuado en su afanamiento por publicar información falsa y ha insistido en su teoría, apuntando incluso que el proceso de comparación de firmas que estaba auditándose era también «falso».
El responsable de implementación del sistema de votación en Georgia, Gabriel Sterling, ha afirmado que con esta auditoría se ha puesto de manifiesto que no ha habido fallo técnico en la contabilidad realizada a través del sistema informático. Se ha constatado que las papeletas en papel coinciden con el resultado que se ha dado a través del soporte informático.
Si bien es cierto que se han descubierto 5.800 votos que no habían sido contabilizados, de los que 1.400 han sido votos nuevos para Trump, en términos globales, supone una cantidad mínima que entraría dentro de los márgenes comprensibles del error habitual en este tipo de procesos. El error cero no existe todavía.