Martín Pallín, fiscal y magistrado emérito del Tribunal Supremo, presenta su nuevo libro «El gobierno de las togas». El conocido jurista, de reconocido prestigio a nivel tanto nacional como internacional, habla siempre claro y en una entrevista concedida a Efe con motivo de la presentación de su última obra, analiza la situación en la que se encuentra el sistema judicial español y su influencia en la política -y viceversa-.
Para asegurar una auténtica separación de poderes, son necesarios «cambios en la cúpula, como una reforma del sistema de elección de los miembros del Consejo General del Poder Judicial». «No hay mayor perversión que los políticos se repartan por cuotas a los miembros judiciales», ha afirmado el magistrado. Y afirma que «o se modifica el sistema de elección de este órgano, o esta influencia entre poderes se va a convertir en una patología crónica».
Amnistía en lugar de indulto
Martín Pallín considera que para solicitar el conflicto catalán la opción más adecuada sería la amnistía para los presos políticos catalanes, ya que el indulto no anularía los antecedentes penales, sino que les pondría en libertad pero mantendría sus cargos.
Supresión del delito de sedición del Código Penal
El jurista tiene claro que debería reformarse el Código Penal eliminando de él el delito de sedición y manteniendo únicamente el de rebelión. Se muestra en contra de la modificación del delito que quiere hacer el Gobierno, considerando que la decisión adecuada sería su eliminación directa del cuerpo jurídico.
Judicialización de los problemas políticos
En el libro precisamente Martín Pallín se centra en el poder que han administran los jueces y fiscales de España, centrándose en la politización de la justicia. Pone el foco en la politización de la justicia y en la existencia de un gobierno dentro del poder judicial, alertando expresamente de la judicialización de los problemas de índole político, como sucede con el independentismo catalán.
El juicio al procés «no fue neutral, sino clamorosamente parcial»
El ex fiscal y magistrado del Supremo afirma que el juicio en el Tribunal Supremo a los líderes independentistas no fue neutral, sino «clamorosamente parcial». Un hecho que posibilitará, según él, que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos lo anule. Se anticipa ya a la respuesta que dará la opinión pública española considerando que «Europa nos mangonea», tal y como sucedía durante el franquismo. Algo que tiene mucho que ver con la falta de cultura democrática en España, algo que considera «bastante preocupante».
La sentencia que ha condenado a los líderes independentistas solamente ha buscado un escarmiento «como el que aplicaban los inquisidores a los herejes».
«Nunca comprenderé cómo el Constitucional puede criminalizar iniciativas políticas»
Martín Pallín habla claro sobre el papel del Tribunal Constitucional, y manifiesta no comprender cómo este órgano ha criminalizado iniciativas políticas, «ni cómo se da por bueno que este órgano se erija como árbitro inapelable de los conflictos políticos».
La prisión preventiva como instrumento represivo
La medida que ha tenido en prisión a los presos políticos catalanes durante dos años antes de que se dictase sentencia se ha aplicado, según Martín Pallín, como «un instrumento represivo», y no encuentra ni un sólo argumento sólido ni fundado en el derecho para ser justificada.
El discurso de Felipe VI el 3 de octubre
Tras el referéndum del 1 de octubre, la aparición del rey Felipe VI el día 3 con su discurso marcó para Martín Pallín «un punto de inflexión» que «gravitará sobre la política española durante mucho tiempo». Y afirma el ex magistrado y fiscal que «el monarca no debe actuar por iniciativa propia».
Aquel día, el rey «salió santificando y dando por buenos los sucesos del 1-0», «frente a una opinión internacional que criticaba las imágenes de la represión policial».