Se sabe, se conoce, pero nadie se atreve a investigar, quizás por falta de datos, o quizás por prudencia. Simplemente para afirmar que la Familia Real de los Borbones es una autentica ruina, un pozo sin fondo. En cualquier caso la monarquía cuesta mucho más de los 8,4 millones de euros que reflejan los Presupuestos Generales del Estado, como mínimo los de este 2021, pero no es posible calcular cuánto.
Felipe VI dispone de esos fondos para organizar la Casa Real que aparecen cada año en las cuentas públicas y que en cada anualidad son publicados por la prensa que revisa si se congelan o suben por encima del IPC, tal como indica elDiario.es. Pero en esa partida no figuran los pagos por multitud de servicios que asumen otras administraciones y cuyo seguimiento es oscuro y enigmatico.
Están los gastos de seguridad que cubren los ministerios de Interior y Defensa, los actos oficiales y la agenda en el extranjero que paga el de Exteriores y existe, además, el cajón de sastre de Patrimonio Nacional, un organismo dependiente del Ministerio de Presidencia, pensado para proteger y conservar los monumentos y edificios singulares del Estado, convertido desde hace años en un coladero para que la familia real pueda cargar también facturas muy diversas.
Por otra parte, Patrimonio Nacional también es propietario de los edificios que utiliza la corona, y por lo tanto es responsable de la conservación. Por ello, según dice ese diario también se pagaron los gastos de la finca de La Angorilla donde se instalaron Corinna y Juan Carlos I durante 4 años. El nidito de amor derivado de un refugio de caza que compartieron durante años, en un embalse de los bosques cercanos al perímetro de la Zarzuela.
Además este organismo también se ha hecho cargo de indemnizar el personal del yate Fortuna, que unos empresarios regalaron al rey emérito en 2000 y al que renunció tres años después. Según la misma fuente, la justicia ordenó que entre Patrimonio Nacional y la empresa concesionario del servicio tenían que pagar 1,23 millones de euros por el despido de la tripulación. La institución pública pagó su mitad.
Además, también pagó el mantenimiento de dos Ferrari que el jeque de Dubai regaló al rey emérito. En total, la institución se encarga del mantenimiento de 55 vehículos. Ese digital informa que aunque ahora el PSOE desde la Moncloa dice que no hay nada ilegal en que Patrimonio Nacional pague el personal eventual que trabaja para la Casa Real porque así lo prevé la ley, hace tres años y medio no decía lo mismo.
Aunque no se cuestionaba ninguna legalidad, en 2017 cuando se estaba debatiendo el informe del Tribunal de Cuentas en el Congreso, sí que el PSOE defendió que Patrimonio Nacional dejara de pagar gastos de la Casa Real, y que todo saliera de los presupuestos del estado, una propuesta que tumbó el Gobierno del PP.