Los bares y restaurantes del País Vasco, de las zonas más afectadas por el coronavirus, podrán volver a abrir a partir de mañana. Así lo ha decidido el Tribunal Superior de Justicia vasco, que ha estimado cautelarmente la petición del sector de la hostelería. Las asociaciones de restauradores lo han recibido como un éxito y el gobierno español se ha limitado a decir que respeta la sentencia.
El tribunal considera que no se ha podido demostrar que estos establecimientos sean la causa del aumento de los contagios después de Navidad. Así pues, deja sin efecto la decisión del gobierno vasco de hacer cerrar la restauración a las «zonas rojas», las que suman más contagios. Los restauradores recorrieron el orden del ejecutivo y ahora el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco les ha dado la razón.
La resolución no entra en el fondo de la cuestión, pero, de momento y de manera cautelar, permitirá que los bares y restaurantes de las llamadas zonas rojas -los municipios con peores datos (tasa acumulada de casos de Covid-19 en los últimos 14 días superior a 500 por cada 100.000 habitantes)- puedan levantar la persiana. Lo podrán hacer con limitaciones de aforo y de horario como en el resto del País Vasco.
El tribunal dice que, con las limitaciones de aforo y con medidas sanitarias como el uso de mascarillas, la hostelería «no parece un elemento de riesgo cierto y grave para la salud pública». A su entender, el gobierno vasco vulneró «el principio de proporcionalidad» y destaca el perjuicio económico que supone el cierre.