Como en tiempos de Franco. Hay que medir las palabras, las que no le gusten al poder del Estado español porque puedes ir a la cárcel. Es algo que no se puede permitir, y la población con un mínimo de frente, tendría que reivindicarlo. Por eso la Plataforma Libertad Pablo Hasel ha valorado positivamente el eco mediático «sin precedentes» que ha tenido la detención del rapero este martes, después de haber estado cerrado durante casi todo un día en el edificio del Rectorado de la Universidad de Lleida.
Así, uno de los miembros de esta organización, David Martín, cree que esta terrible imagen «ha hecho daño al Estado» y que éste ha cometido «un error muy grave» porque, añadió, se ha generado «el efecto contrario al que pretendían entre la población», que ahora participará en las múltiples manifestaciones convocadas para denunciar los hechos. Además, lamentó que esta «muestra gráfica» es una constatación, a su juicio, de una falta de «libertades y democracia».
Martín ha explicado que no imaginaban que la detención de Hasel pudiera tener este seguimiento por parte de los medios de comunicación, entre los que hay de carácter internacional. En este sentido, a pesar de lamentar su arresto, cree que «mucha gente despertará y comenzará a moverse» para denunciar estos hechos. También ha afirmado que la situación del rapero demuestra, en su opinión, que hay una falta de derechos fundamentales como el de la «libertad de expresión».
El miembro de organización tildó de «situación difícil» la que se ha vivido en la Universidad de Lleida en los momentos previos a la detención de Pablo Hasel. «Nadie podía decir cómo la gente tenía que responder ante la agresión y la violencia que supone que venga la policía armada», ha asegurado Martín, que ha detallado que las personas que estaban cerradas en el Rectorado con él han montado barricadas para retrasar la arresto del rapero. No obstante, evitó valorar los destrozos que ha sufrido el edificio.
