Ironía u oportunidad de desquite. El Grupo Godó, paradigma de la españolidad en Catalunya desde catalanes en los medios de comunicación, tendrá que someterse al ‘arbitraje catalanista indepe’ para poder vender su canal de televisión, 8tv. Será importante ver si los partidos soberanistas torpedean la venta, porque el nuevo interesado ya posee Teve.cat y en estos momentos los medios son más que nunca un arma contra los intereses del territorio y la sociedad.
A día de hoy se encuentra a la espera de una transcendental decisión desde el Consell de l’Audiovisual de Catalunya -Consejo Audiovisual de Catalunya- (CAC), supervisada por la Generalitat, para abandonar su proyecto televisivo de 8TV, con una audiencia residual en esta comunidad autónoma (0,7%) y el cual le ha generado pérdidas de casi 45 millones de euros durante la última década. Hay que recordar que el Grupo Godó recibe importantes subvenciones de la Generalitat sin tener necesidad de ello.
El grupo, propietario de la emisora de radio, RAC1, así como de los diarios La Vanguardia y Mundo Deportivo anunciaba hace unos días un acuerdo con la empresa OC 2022 S.L., propiedad del empresario de origen italiano Nicola Pedrazzoli, para transferir la titularidad de su canal de televisión, en una operación que, según indica en varias publicaciones Economía Digital, rondará los diez millones de euros.
Será el CAC el encargado de convocar los concursos de frecuencias de televisión y radio en Catalunya, así como de adjudicar y retirar las licencias a los operadores del sector. Actualmente, este órgano está controlado por la Generalitat, dado que los consellers independentistas cuentan con una mayoría de voto en el órgano plenario. Este, o permite su venda, o deja que acabe por cerrarla o por arruinarse, a Javier Godó Muntañola, III Conde de Godó y Grande de España.