El transfuguismo en España es algo cotidiano. Lo normal en otros muchos países es que si tu partido político no tiene ya la confianza del electorado, te marches y muy buenas. Aquí antes que dejar la poltrona cualquier cosa es válida, especialmente para mantener el régimen del 78, entre ellas cambiar de chaqueta.
La oferta del presidente del Partido Popular, Pablo Casado, a la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, para que ambos partidos pactasen una misma dirección política consistió, básicamente, en que esta última entrase en el comité de dirección del PP como vicesecretaria general, según indica Casado.
Este ofrecimiento se produjo en julio tras los comicios gallegos y vascos del 12-J. «A Inés Arrimadas le hemos ofrecido todo. Y todo es todo». Casado desveló este lunes en una entrevista en Antena3 que no solo ofreció una España Suma a Arrimadas para que ambos partidos fuesen juntos tras las elecciones del País Vasco.
Casado prosiguió, «sino que era bueno hacer una convergencia de los dos partidos, que pudiéramos hacer con generosidad una nueva estructura entre las dos direcciones». Admitiendo que el pacto también conllevaba que la presidenta naranja se convirtiese en la portavoz del PP en la Cámara baja en sustitución de Cayetana Álvarez Toledo,
