El líder de Más País, Iñigo Errejón, ha anunciado hoy que no participarán en más debates donde esté Vox. Una decisión clara, y contundente, que se ha tomado después de lo sucedido esta mañana en el no debate de la SER, que finalmente ha tenido que suspenderse ante las provocaciones de la candidata de VOX.
«No más shows regalados a la extrema derecha», ha sentenciado Errejón, abriendo así una postura más que razonable después de que Pablo Iglesias se levantase de la mesa de la SER, y le hayan seguido después, abandonando el debate el candidato socialista Ángel Gabilondo, y la candidata de Más Madrid, Mónica García.
Se sigue así el camino que se abría en el Parlamento catalán, cuando en la sesión de investidura del pasado mes, en el momento en que intervenía el portavoz de la formación ultraderechista, muchos de los diputados y diputadas abandonaron el hemiciclo. Algunos, desde los medios de comunicación, consideraron que esta actitud de abandono era «antidemocrática» por no escuchar a los oponentes. Sin embargo, la postura se va generalizando, en vista de los mensajes llenos de odio y datos falsos que está utilizando la extrema derecha para hacer campaña.
La polémica del cartel donde intentaban generar una criminalización de los Menores Extranjeros No Acompañados, con datos manipulados por el momento ha posicionado al juez de guardia como garante de que este tipo de mensajes sigan ocupando un lugar en el espacio público. Un gesto sorprendente, en comparación con la actitud que mantuvo la justicia hasta que hizo caer a Quim Torra como president de la Generalitat, precisamente también por un cartel, pero bien distinto: en su caso se defendía la libertad de los presos políticos y por este motivo, la Junta Electoral abrió un proceso que terminó en los tribunales y acabó suponiendo la inhabilitación de un presidente. Sin embargo, un cartel promovedor de odio, con datos falsos y denunciado por todas las organizaciones de defensa de derechos humanos, así como por el propio Gobierno y las formaciones políticas de toda índole (excepto Vox, lógicamente), ha sido de momento «amparado» por un juzgado de Madrid, motivo por el cual, el cartel sigue en las calles.
Se abre ahora con la decisión de Errejón una nueva posibilidad en la campaña de las elecciones de Madrid: el arrinconamiento de la extrema derecha. Un asunto sensible, porque puede alimentar su discurso y generar una falsa «defensa» por parte de los más ultras.
No hay condiciones para debatir así. No más shows regalados a la extrema derecha. Este ha sido el último. A barrerlos en las urnas.
— Íñigo Errejón (@ierrejon) April 23, 2021