Brutal. El primer pleno del Parlament de Catalunya celebrado con los 135 diputados reunidos en el hemiciclo desde el estallido de la pandemia se salvó de un intento de transformarlo en circo una vez más por parte de los diputados de Ciudadanos, gracias a la firmeza y el conocimiento del cargo por parte de la Presidenta del Parlament, Laura Borràs.
Después de que Jaume Alonso-Cuevillas le espetara una colleja a la diputada naranja Anna Grau diciéndole «que trague saliva, no sea que tengamos un accidente», otro diputado del grupo de Carrizosa, Nacho Martín Blanco, ha hecho el ridículo más grande intentando tomar la palabra para desautorizar a Cuevillas.
Lo que no se esperaba Martín Blanco es que la presidenta del Parlament, Laura Borràs, le pidiera por qué artículo pide la palabra, lo cual Blanco no ha sabido responder, mientras sonreía nerviosamente. Claramente, la presidenta le ha dejado con un palmo de narices insistiendo en el número del artículo en el que quiere basar su interrupción.
Cuando finalmente Blanco dijo que era por el artículo 87, es decir, el de alusiones, el problema ha sido que nadie le había aludido. Blanco ha tenido que ser rescatado por la misma Anna Grau cuando ella misma ha pedido la palabra amparándose en el mismo artículo. Esto no impide que el repaso de Borràs a Blanco haya durado hasta 2 minutos que para el de Ciudadanos han parecido una eternidad.
Vídeo:
El Parlament de Catalunya recupera la dignitat.
Gràcies Presidenta @LauraBorrasCop de porta als del “a por ellos”. pic.twitter.com/OocM3BkXYt
— Miriam Nogueras 🎗 (@miriamnoguerasM) April 29, 2021
La brutal rapidez mental, junto al rigor y responsabilidad del cargo, además del tono sereno por parte de Borràs en su primera intervención en un contratiempo como presidenta del Parlament, ha sido muy aplaudida en las redes sociales:
