El expresidente de Ciudadanos Albert Rivera, días después de la debacle de Cs en Madrid y a punto de desaparecer, ante el transfuguismo desde su ex partido, ha afirmado este viernes que él no divide a sus antiguos compañeros entre «buenos y malos» en función de si siguen estando dentro de la formación naranja o si la han abandonado mientras lo lidera Inés Arrimadas. Ha deseado «suerte y acierto» a la actual dirección del partido, cuyas decisiones ha evitado comentar, y ha trasladado su «cariño» y entendimiento a los cargos que han dejado de estar afiliados.
«A los que están dentro, suerte y acierto, y a los que están fuera, todo mi cariño, porque yo no distingo entre buenos y malos ciudadanos. De hecho, me empeñé en unir a gente muy diversa en un proyecto, se incorporó gente que venía del PSOE, de la sociedad civil y del PP», ha declarado durante un encuentro organizado en Málaga por ‘Diario Sur’, en el que ha presentado al consejero de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía, Javier Imbroda (Cs). Donde se le ha recordado que Arrimadas se ha quedado sin representación en la Asamblea de Madrid y se ha hundido electoralmente en Catalunya.
Rivera ha explicado que, mientras fue presidente de Ciudadanos, su intención nunca fue «repartir carnés de militancia», sino «unir a la gente que piensa distinto pero que comparte los valores constitucionales, la libertad, la igualdad entre españoles y el europeísmo». A raíz de la fuga de numerosos cargos de Cs al PP, desde la dirección de la formación naranja, encabezada por Inés Arrimadas, se dijo que los que se marchaban lo hacían porque estaban en Cs pero no eran de Cs.
El exlíder de Ciudadanos, que, tras su dimisión en noviembre de 2019 por el fracaso en las elecciones generales, volvió a la abogacía, ha asegurado que actualmente tiene entre sus amistades a personas que continúan formando parte del partido y a otras que ya no están afiliadas. «No tengo ni media pero, ni media cosa mala con aquellos que han sido mis compañeros y que les he elegido yo», ha comentado. Se percibe que Ciudadanos ya no le quita el sueño lo más mínimo.