El juzgado de primera instancia 2 de Sabadell ha ordenado en un auto dictado hoy que la causa por el asesinato de Helena Jubany sea abierto de nuevo.
Concretamente el juez ha solicitado a la Policía Nacional que investigue el disco duro del ordenador de Helena. Aunque la defensa pedía que fueran los Mossos d’escuadra quien llevase a cabo la investigación, el juez considera que debe ser la Policía Nacional, que fue el mismo cuerpo que investigó en su momento sobre el asesinato de esta bibliotecaria en el año 2001.
En su momento se investigó a tres personas sospechosas: Montse Careta, Santiago Laiglesia y Ana Echaguivel. Careta se suicidó cuando estaba en prisión antes de que se celebrase el juicio contra ella, y los cargos contra Echaguivel se retiraron. Laiglesia fue detenido e investigado pero nunca imputado.
En el ordenador se podría encontrar, precisamente, información referente a los anónimos que Helena había recibido días antes de ser asesinada. Helena tenía 27 años y su cadáver fue hallado tras ser arrojado desde una azotea, desnudo y con marcas de lesiones múltiples, como quemaduras de cigarrillos.
En el ordenador hay conversaciones donde Helena explica lo que le está sucediendo, al recibir mensajes anónimos justo dos días antes de ser asesinada.