Los Fondos Europeos a la recuperación van a traer cola en España. Recordemos que la Unión Europea ha alcanzado un acuerdo sobre el paquete de recuperación y el presupuesto 2021-2027 que contribuirá a la reconstrucción europea tras la pandemia del coronavirus y apoyará la inversión en transición ecológica y digital. Pero aquí eso se entiende de otra manera.
Si ya hay polémica por la elección del Gobierno a la empresas seleccionadas, [las más potentes del país, las del IBEX] los bancos no van a ser menos, y están viendo en los fondos europeos un nicho de crecimiento. Las entidades españolas han montado o están ultimando equipos especializados en estas ayudas, que alcanzarán hasta los 140.000 millones en España durante los próximos años, para tratar de captar clientes e incrementar el negocio con las empresas.
Así, el asesoramiento a las empresas para aspirar a beneficiarse de los fondos europeos, la financiación complementaria o el nexo con inversores se están convirtiendo en un nuevo campo de competencia entre los bancos españoles. Las entidades esperan poder trabajar con esas empresas o segmentos de compañías receptoras de fondos y financiarlas, después de haber desplegado créditos por más de 100.000 millones con avales públicos del ICO y haber trabajado con empresas en programas como los fondos del Banco Europeo de Inversiones (BEI) o la política agraria común (PAC).
El primer banco en anunciar públicamente un servicio para los Fondos Next Generation ha sido el Banco de Santander, que ha alcanzado un acuerdo con KPMG. La consultora venía trabajando con algunas entidades en este campo. También trabajará con LocalEurope, consultora especializada en fondos europeos. El Gobierno y su Plan dicen una cosa, y después se hace otra. La carrera de la picaresca por los fondos no ha hecho más que comenzar.