El brutal caso de corrupción que rodea al PP desde hace ya unos años, conocido como la «Caja B», deja nuevas evidencias de su existencia.
Según ha avanzado la Cadena Ser, la Intervención General del Estado (IGAE), ha analizado nueve contratos que se adjudicaron cuando José María Aznar era presidente de los populares, y ha encontrado un punto en común de posible corrupción.
Esto hace pensar en más que un posible amaño en la adjudicación de estos contratos, con un importe de hasta 200 millones de euros, dirigidos a un donante del PP, Alfonso García Pozuelo.
De hecho, según las informaciones, Pozuelo ya reconoció la existencia de esta caja B. La apariencia de estos contratos parecía legal, pero resulta que Pozuelo siempre hacía la oferta más barata, ya que los documentos se concedían por concurso público.
El juzgado que lleva el caso cree que tiene indicios sólidos de cómo se amañaban las adjudicaciones a favor de los donantes a la «Caja B del PP», y pide un informe global del caso.