La mayoría de los casos graves de COVID-19 se han tenido produciendo en hombres mayores de 50 años. Es el perfil de los afectados por los cuadros más complicados. Sin embargo, el perfil de las personas que padecen los síntomas de la enfermedad durante más tiempo, responde al de mujeres relativamente jóvenes. ¿A que se debe?
Los primeros informes publicados sugerían que la edad media de las pacientes con Covid- prolongado (Long Covid en inglés) es de 40 años, y en proporción superan los casos a los de los hombres en la proporción de cuatro frente a uno. La mayoría es abrumadoramente femenina.
Según ha informado The Guardian, la Dra. Sarah Jolley, directora de la clínica de atención Post-Covid en Colorado, alrededor del 60% de sus pacientes son mujeres. En Suecia se reportan también datos que apuntan en el mismo sentido, siendo del 70-80% potencialmente.
Las células T y la compensación por embarazo
La profesora inmunólogoa Akiko Iwasaki ha encontrado que las células T, un grupo de células importantes para el sistema inmunológico que buscan y destruyen las células infectadas por virus, son mucho más activas en las mujeres que en los hombres durante la primera etapa de la infección. Según los estudios, la razón apuntaría a la genética, a las dos copias del cromosoma X. Por eso, las respuestas inmunitarias, que suelen ser más fuertes en las mujeres, tienen más presencia.
Pero además de la cuestión genética, está la de la teoría de la «compensación por embarazo». Según esta hipótesis, las mujeres en edad fértil desarrollan un sistema de «protección» especialmente reforzado durante el periodo en el que el cuerpo podría albergar una vida, precisamente para proteger a la madre y al embrión. Esta sería una de las razones por las cuales las mujeres no suelen tener tantas complicaciones en los cuadros graves de la enfermedad.
Sin embargo, de la misma manera que esta respuesta es positiva de cara a los cuadros graves, según explican los expertos, una de las razones por las que se produce un covid prolongado es, precisamente, que la respuesta inmune conlleva reacción con fuerza, lo que supone que se produzcan inflamaciones crónicas en todo el cuerpo, lo que supone dolor, fatiga o confusión mental.
Pero no son las únicas teorías que se barajan: hay expertos que apuntan a la enfermedad autoinmune, lo que supone que elementos del sistema inmunológico produzcan anticuerpos autodirigidos conocidos como autoanticuerpos, que atacan a los propios órganos del cuerpo.
¿Enfermedad autoinmune asociada a los estrógenos?
Los estudios realizados en pacientes con covid prolongado muestran la presencia de niveles elevados de más de 100 autoanticuerpos dirigidos contra una variedad de tejidos.
Las mujeres, una vez más, presentan un perfil más propenso a las enfermedades autoinmunes porque tienen niveles más altos de un interruptor molecular llamada VGLL3 y puede suponer que el sistema autoinmune se acelere. Los hombres están más protegidos ante estas enfermedades autoinmunes porque la testosterona frena la creación de las células B, que tienen mucha relevancia en estos cuadros.
De hecho, hay científicos que consideran que el Covid prolongado podría ser una enfermedad autoinmune asociada a los estrógenos (hormonas femeninas). De ser esta la causa, existirían posibilidades de tratamiento con esteroides, según apuntan los expertos.