El juicio a Bárcenas y la caja B del PP ha terminado conociéndose judicialmente como el ‘Caso Kitchen’. Lo último sobre el juicio es que Rajoy, el ex líder del partido popular y presidente del Gobierno en esos momentos, dio la instrucción a sus subalternos de «hacer todo lo que tuvieran que hacer para frenar a Bárcenas».
Son palabras de Rajoy, según Luís Bárcenas, que volvió a insistir ante el juez de su caso que, al salir de prisión, en 2015, se dio cuenta de que habían desaparecido del estudio de su mujer una serie de documentos sobre los supuestos pagos en B y la grabación que él mantiene e implica a Rajoy.
Por eso se investiga al ex comisario José Villarejo, al ex número dos de la Policía, el también comisario Eugenio Pino, y al antiguo chofer de Luis Bárcenas, Sergio Ríos (que saco el pendrive con la grabación), por la supuesta operación del Ministerio del Interior para sustraer información sensible al ex tesorero.
Ahora al ex presidente del Gobierno le preocupa la situación en la que se encuentra la ex secretaria general del PP María Dolores de Cospedal, imputada, al igual que su jefe de Gabinete, por si pudiera irse de la lengua, si se le presiona demasiado o decide hablar por su cuenta. «M. Rajoy» vuelve a escena.
